El reciente aumento de la violencia, insta al organismo a asumir un papel más activo
Los informes de la ONU, muestran que el programa del gobierno mexicano para proteger a periodistas y activistas no cuenta con fondos suficientes y no puede garantizar la seguridad en medio de la impunidad y las amenazas generalizadas, afirmó el alto comisionado de las naciones unidas para los derechos humanos en México, en las últimas semanas varios periodistas y líderes habrían sido abatidos en medio de un desmedido aumento de la violencia en el país azteca.
Al menos 11 reporteros y 13 activistas de derechos humanos han sido asesinados en lo que va del año en el país, según asegura el grupo relator de la ONU, aunque otros recuentos ponen el número total de al menos 12 periodistas, lo que supera los recuentos del año pasado, y sugiere que el número de muertos podría alcanzar niveles récord en 2019.
Nevith Condes Jaramillo fue el último reportero encontrado muerto en México, y el fiscal estatal indicó el sábado pasado, que murió como resultado de ser apuñalado varias veces, Jaramillo, de 42 años, también se llamaba Nevith N. y dirigía el sitio local de noticias El Observatorio del Sur.
El representante de la ONU y jefe del ACNUDH en México, Jan Jarab, informó que el «compromiso político» de México para proteger a periodistas y activistas había demostrado ser un desafío en varios niveles, pero la preocupación plantea preguntas sobre cuánto el presidente Andrés Manuel López Obrador ve el tema como una prioridad, pues el recuento total de asesinatos en México también ha seguido aumentando, lo que subraya la escala de la tarea que enfrenta.
Muy pocos casos de asesinato resultan en condenas, o incluso arrestos y más de la mitad de los sospechosos identificados por el programa eran funcionarios públicos, «sin la lucha contra la impunidad, no habrá un cese de fuego contra los periodistas aquí en México», afirmó Ana Ruelas, de Artículo 19, un grupo que promueve la libertad de prensa.
Los grupos de derechos humanos exponen que los funcionarios que amenazan a periodistas y activistas a menudo buscan ocultar la corrupción y proteger sus intereses personales, «México carece de un reconocimiento suficiente por el trabajo de los defensores de los derechos humanos y los periodistas», indicó Jarab, en una conferencia de prensa donde presentó un informe de la ONU.
El informe de ACNUDH de 410 páginas, argumenta que la impunidad en México fue una razón clave para impulsar el programa, «las autoridades deben condenar públicamente todas las agresiones», expresó el representante de la ONU.
La ONU cree que el gobierno ha desamparado a los periodistas y a líderes sociales en medio de la creciente violencia
El mecanismo de protección del gobierno para defensores de derechos humanos y periodistas, que proporciona recursos como botones de pánico, sistemas de vigilancia y guardaespaldas, actualmente atiende a 903 personas, en comparación con 48 en su lanzamiento hace cinco años.
Sin embargo, según se lee en el informe de la ONU, los presupuestos y la dotación de personal no han seguido el ritmo del programa, y el programa en sí que podría abarcar a más de 3 mil 400 personas al final del período de seis años de López Obrador en 2024, no lo ha realizado.
«El crecimiento que hemos tenido en los últimos años podría acelerarse si las cosas no cambian», agregó el enviado de la ONU, «el mecanismo debe fortalecerse, debe contar con personal suficiente para proteger a los beneficiarios y tomar medidas preventivas».
El personal y el presupuesto para la protección, se ha estancado desde 2014, mientras que el presupuesto de este año es inferior al que se gastó en 2017 y 2018, según el informe y el gobierno aún no ha respondido a una solicitud de abril para aumentar el presupuesto.
Frente a los escasos recursos, el programa no puede garantizar un funcionamiento eficiente y adecuado, según el informe de la ONU, el personal a menudo sufre retrasos en la reacción a las amenazas porque no puede acceder al correo electrónico del trabajo fuera de la oficina o tiene dificultades para navegar por internet en las computadoras del gobierno.
Una compañía que monitorea las alertas de los botones de pánico no puede evaluar y reaccionar rápidamente a los nuevos riesgos, incluidas las emergencias, y eso a desmedido a los transgresores, por lo que cuatro periodistas fueron asesinados solo este mes en México, por lo que reporteros sin fronteras ha calificado al país, como el más peligroso para los periodistas en el hemisferio occidental, junto con Colombia.
Jan Albert Hootsen, el representante de México para el comité para la protección de los periodistas, CPJ, indicó que, en los últimos años, «la situación solo ha empeorado», «estamos esperando una respuesta del gobierno federal, que desafortunadamente no se ha materializado hasta ahora», afirmó que el gobierno no parece tener en agenda la discusión de un aumento de presupuesto para la protección, debido a su política de austeridad.
