El fentanilo fue el tema principal de la reunión entre el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y el presidente de China, Xi Jinping. Durante su primera reunión presencial este jueves 16 de noviembre en San Francisco, California, como parte de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico, APEC.
En el encuentro, que duró cerca de una hora, los mandatarios acordaron fortalecer la relación bilateral. Cooperar en el control de los precursores químicos para la fabricación de fentanilo, una droga sintética que causa miles de muertes en EEUU y que genera presiones de Washington a México.
El fentanilo es un opioide 50 veces más potente que la heroína y 100 veces más que la morfina. Que se usa como analgésico y anestésico en medicina. Pero, que también se produce de forma ilegal y se mezcla con otras sustancias como la cocaína o la metanfetamina para aumentar sus efectos.
Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), el fentanilo fue responsable de más de 36 mil muertes por sobredosis en 2020. Lo que representa el 60% del total de muertes por opioides en ese país.
México es uno de los principales países de tránsito del fentanilo y sus precursores químicos, que provienen principalmente de China e India
Los precursores, se envían por vía marítima o aérea a los puertos mexicanos, donde son procesados por grupos del crimen organizado. Luego, son transportados a la frontera con EEUU.
En mayo pasado, el presidente López Obrador señaló tener pruebas de un cargamento de precursores químicos que llegó de un puerto de China. Estas entraron al puerto de Lázaro Cárdenas en Michoacán. Por lo que, anunció que enviaría una carta al presidente Xi Jinping para pedirle su colaboración para combatir este problema.
En la reunión de este jueves, los dos líderes coincidieron en que se trata de un reto compartido. Acordaron intercambiar información y lecciones aprendidas en la lucha contra el tráfico ilícito de precursores químicos.
También, en establecer mecanismos de cooperación y coordinación entre las autoridades competentes de ambos países. Además, el presidente Xi Jinping ofreció a México una donación de 250 mil unidades de enseres básicos. Para apoyar a la población afectada por el huracán “Otis” en el estado de Guerrero, que causó más de 100 muertos y miles de damnificados el pasado 25 de octubre.
Los mandatarios también abordaron temas de comercio e inversión, y expresaron su voluntad de ampliar y diversificar los intercambios económicos entre México y China. Las dos mayores economías de América Latina y Asia, respectivamente. Según datos del Banco Mundial, el comercio bilateral entre ambos países alcanzó los 95 mil millones de dólares en 2020. Esto, representa el 10% del comercio total de México y el 1.4% del comercio total de China.
Sin embargo, la balanza comercial es deficitaria para México, que importa de China productos manufacturados, electrónicos y textiles. Y que, a China materias primas, minerales y alimentos.
Para reducir este desequilibrio, los presidentes acordaron impulsar la participación de las empresas mexicanas en el mercado chino. Especialmente en los sectores agroalimentario, energético, turístico y cultural, y facilitar el acceso de los productos mexicanos a las plataformas de comercio electrónico de China.
Asimismo, se comprometieron a promover la inversión recíproca y el desarrollo de proyectos conjuntos en infraestructura, telecomunicaciones, transporte y logística. Aprovechando las oportunidades que ofrece la iniciativa de la Franja y la Ruta, el ambicioso plan de China para conectar a más de 60 países de Asia, Europa y África mediante una red de corredores comerciales.
La reunión entre López Obrador y Xi Jinping fue la primera de una serie de encuentros bilaterales que el presidente mexicano sostendrá en el marco de la cumbre de la APEC.
El mandatario también se reunirá con el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau. Y con, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, con quien abordará temas de migración, seguridad, energía y desarrollo regional.
