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Cuba detiene activistas culturales de San Isidro

Fuerzas de seguridad cubanas desalojan a huelguistas en una redada en el cuartel general

Las autoridades cubanas han expulsado una protesta de un grupo de artistas disidentes, académicos, periodistas y activistas, denominado San Isidro, desalojándolos de su sede donde habían declarado una huelga de hambre contra las restricciones a las libertades civiles.

Las autoridades expresaron que tuvieron que intervenir el movimiento San Isidro, debido a violaciones de los protocolos de higiene para prevenir la propagación del coronavirus. Aunque sólo sería un pretexto «absurdo» para poner fin a una protesta que había puesto de relieve en los abusos contra los derechos humanos en el estado unipartidista.

«Entraron por la fuerza, rompiendo la puerta», expresó Iliana Hernández, una periodista independiente, en un video en vivo en Facebook. «Muchos militares, como si fueran médicos usando batas.»

Hernández expresó que la policía la había detenido a ella y a otros antes de llevarlos a sus hogares. El grupo San Isidro expuso que a la 1 de la mañana, hora local, tres de los 14 detenidos seguían sin contacto.

Movimiento San Isidro.
El miembro del movimiento San Isidro, Michel Matos, expresó que, si las autoridades estuvieran realmente preocupadas por el coronavirus, no le habrían permitido a él y a la mayoría de los demás volver a casa. El gobierno indicó que los disidentes eran mercenarios que buscaban desestabilizar Cuba.

Los disidentes del muy poco conocido movimiento San Isidro lo visibilizaron en las redes sociales

El movimiento San Isidro, había sido poco conocido antes de dar a conocer la protesta en las redes sociales. Uniendo a los grupos de oposición normalmente frágiles en simpatía en Cuba y haciendo críticas a las autoridades de grupos de derechos humanos como Amnistía Internacional.

El movimiento de San Isidro fue fundado en 2018 para oponerse a un nuevo decreto que limitaba la libertad de expresión, a menudo mediante el uso de interpretaciones artísticas irreverentes. Ha tenido numerosos encuentros con las autoridades comunistas de Cuba, que fruncen el ceño sobre la disidencia pública.

Después de que los miembros del grupo protestaron contra una condena de ocho meses de cárcel del rapero, Denis Solís. Lo han acusado de desacato, las fuerzas de seguridad sitiaron su cuartel general en La Habana este mes.

Ocho miembros y simpatizantes del movimiento declararon entonces una huelga de hambre y expresaron que algunos tampoco estaban bebiendo agua. Esto no pudo ser verificado de forma independiente, las fuerzas de seguridad bloquearon el acceso a las instalaciones.

Fuente
GrammaPlenglish.ComDiarioDeCubaBBC

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