
Venezuela desarrolló uno de sus mejores desempeños en los olímpicos
Venezuela está celebrando la mejor actuación olímpica de su historia. Pero además de imágenes públicas, los olímpicos criollos se convierten en efigie del gobierno nacional, aunque sea una pintura falsa.
La delegación, compuesta por solo 43 atletas, marca uno de los grupos olímpicos más pequeño de Venezuela en 20 años. El equipo fue capaz de ganar una medalla de oro y cuatro medallas de plata a pesar de la falta de apoyo oficial del gobierno socialista.
Más, sin embargo, los líderes de la revolución bolivariana, buscan hacer pasar estos triunfos, duramente ganados de los atletas de Venezuela como propios.
Hay muchas historias contrastantes en medio de los nuevos medalleros olímpicos de Venezuela. Historias de perseverancia contra todo pronóstico que están inexorablemente ligadas al colapso económico y social del país.

Los atletas olímpicos, llegaron a Tokio sin casi ningún apoyo oficial
Mientras desde su propia óptica, el gobierno explota, cualquier oportunidad de capitalizar los triunfos olímpicos. Al, ejemplo, cuando el halterofilista Julio Mayora ganó la primera medalla para Venezuela, el país se encontró celebrando y arraigando al atleta.
La misma situación la vivió el boxeador venezolano Eldric Sella. Él huyó de Venezuela en 2018 a Trinidad y Tobago, compitió bajo el Equipo Olímpico de Refugiados.
La falta de apoyo del gobierno a los olímpicos de la nación se refleja en la historia de Paola Pérez. La nadadora se clasificó #20 en la competencia femenina de natación de 10 km a pesar de no pasar por el entrenamiento adecuado que recibieron sus contrincantes.
Pérez migró a Chile, ya que no había piscinas abiertas en su estado natal de Táchira para practicar. Trabajó como instructora de natación para cubrir sus gastos de entrenamiento. Después de que la pandemia del Coronavirus fue obligada a regresar a Venezuela.
Debido a la falta de apoyo del gobierno venezolano, tuvo que lanzar una campaña de GoFundMe solo para poder llegar a Tokio.
Algunos, no recibieron ni una camiseta
Hay más historias de éxito venezolano durante esta sede olímpica. Y la medalla de plata de Keydomar Vallenilla y la medalla de plata de Daniel Dhers, son pruebas. Ambos llegaron a ser olímpicos, gracias al apoyo privado.
Dhers, cuenta con patrocinio privado y construyó su carrera en Estados Unidos, estableciendo su propio complejo deportivo en Raleigh, Carolina del Norte.
Cuando Yulimar Rojas estableció un nuevo récord mundial y ganó una medalla de oro, el país estaba justificadamente jubiloso, aunque por una breve tarde. Ella sí recibió algún apoyo oficial.