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Deslizamientos de tierras en Quito

Decenas de personas mueren por deslizamientos, mientras las lluvias inundan Quito

Una ladera debilitada por la lluvia recurrente de varios días, causó deslizamientos mortales en la capital de Ecuador, matando al menos a 24 personas mientras arrasaba casas y un campo deportivo.

El departamento de seguridad de Quito indicó que al menos 48 personas más resultaron heridas. Al menos unas ocho casas se derrumbaron o resultaron dañadas cuando los deslizamientos ocurrieron durante la noche.

Las autoridades, reportaron 12 personas desaparecidas. Mientras, los vecinos se unieron a los trabajadores de rescate en la búsqueda de sobrevivientes de los deslizamientos que golpearon después de casi 24 horas de lluvia.

Las tormentas cayeron fuertes en la capital ecuatoriana y caían durante la noche, cuando se sintió que las casas se movían. Muchos imaginaron que un terremoto los habría afectado.

Mortal deslizamiento en Quito.
Las autoridades de Quito señalaron que las precipitaciones en un sector fueron más altas desde 2003. Vertiendo 75 litros de lluvia por metro cuadrado.

Equipos de rescate buscan entre los escombros de los deslizamientos

De repente, el agua y las rocas comenzaron a entrar a través de puertas y ventanas y quedaron pocas oportunidades, para escapar de las casas y edificios que quedaron destruidos durante el deslizamiento.

«Apenas tuve tiempo de agarrar la mano de mi hijo de y corrí a las escaleras, a la terraza. De repente, las paredes al frente y a un lado desaparecieron», comentó algún sobreviviente.

«Gritamos a los vecinos en el primer piso, pero el agua se llevó a una madre junto a su hija», explicaba un testigo ocular, de pie ante las ruinas de su casa.

«Pensé que iba a morir con mi hijo. Lo abracé fuerte y nos sacudimos, creo que por el frío y el miedo… Apenas sobrevivimos», agregó esta, rompiendo a llorar.

Olas de lodo, de unos 3 metros de altura, transportaron vehículos, motocicletas, contenedores de basura y otros escombros bajo fuertes lluvias en los barrios de La Gasca y La Comuna debajo de las laderas del volcán Rucu Pichincha.

Cuando comenzó el rescate, la policía pidió silencio para que se escucharan los gritos de los atrapados. El alcalde de Quito, Santiago Guarderas, afirmó que las intensas lluvias saturaron los suelos, provocando los deslizamientos de tierra.

Laura Quiñónez, de sesenta y cinco años, que estaba junto a una ambulancia mientras sus vecinos intentaban recuperar los electrodomésticos de sus casas destruidas. Mientras afirmaba haber «perdido todo». No tengo nada. Todo ha terminado».

Fuente
AljazeeraCBSBBC

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