Han continuado las capturas luego de la fallida incursión marítima
El fiscal general venezolano Tarek William Saab señaló, que los agentes de la ley detuvieron a un total de 66 personas involucradas en la reciente invasión de mercenarios, de nombre Operación Gedeón. A principios de mayo, el ministro venezolano del Interior, Néstor Reverol, informó que se había impedido un intento de invasión marítima por parte de militantes colombianos mientras intentaban acercarse al estado norteño de La Guaira en lanchas rápidas.
Ocho militantes fueron asesinados, y varios otros fueron detenidos en la contraoperación. Uno de los detenidos, el ciudadano estadounidense Luke Denman, un empleado de la compañía militar privada Silvercorp USA, expuso durante un interrogatorio que el objetivo de la operación Gedeón, era apoderarse del aeropuerto de Caracas y controlarlo hasta que el presidente Nicolás Maduro fuera llevado a los Estados Unidos. Tanto Washington como Bogotá han negado su papel en el incidente.
«En este momento, 66 personas involucradas en estos hechos han sido detenidas y están bajo el imperio de la justicia. Se han emitido noventa y nueve órdenes de detención, de las cuales 63 todavía están en proceso de ejecución. Muchas de estas personas están fuera del país entre Colombia y Estados Unidos», expresó Saab en un resumen sobre los movimientos contra Gedeón.
El fiscal general añadió que durante 11 interrogatorios se había establecido en una organización encargada de financiar la logística, el catering y el alquiler de campos de entrenamiento para mercenarios. Ya se han emitido órdenes de detención para los empleados de la fundación Futuro Presente.
La semana pasada, la fiscalía general de Venezuela emitió órdenes de arresto contra Jordan Goudreau, CEO de la compañía militar privada Silvercorp USA, cabecilla de la Operación Gedeón y a otras 21 personas por su papel en el reciente intento de invasión en el país latinoamericano.
Gedeón ha sido el último clavo en la urna política de Juan Guaidó, con el que ha demostrado su incompetencia y cobardía
Los dos ciudadanos estadounidenses detenidos por las fuerzas de seguridad venezolanas por su papel en un intento fallido de golpe de Estado en el país, declararon en videos de interrogatorios anteriores que su misión era secuestrar al presidente Nicolás Maduro como parte de un contrato con una compañía de seguridad privada y la oposición venezolana.
Los ex Boinas Verdes de Estados Unidos, Luke Denman y Airan Berry, capturados en Venezuela mientras participaban en la operación Gedeón, aparecieron de nuevo en la televisión del país en nuevos videos de interrogatorio grabados, según las autoridades venezolanas. Uno de los detenidos declaró que estaban «invadiendo un país, tomando objetivos militares y policiales y capturando al presidente en ejercicio».
Los cautivos, vestidos con uniformes de prisión naranja, compartían nuevos detalles sobre su misión en Venezuela, revelando que la palabra clave para «el rehén, o el objetivo militar», refiriéndose a Maduro, era «jackpot». «Era una palabra que solíamos hablar de la persona que buscamos – el rehén o el objetivo militar», comentó Denman, cuando se le preguntó sobre el significado de la palabra «jackpot».
Denman también señaló que no firmó un «contrato» con Jordan Goudreau, el jefe de Silvercorp, una compañía de seguridad privada estadounidense que se cree que está detrás del intento de golpe de Estado. El detenido afirmó que «tuvo una conversación informal», en la que Goudreau le proporcionó «algunas vagas directrices de misión sobre la formación de los venezolanos y venir aquí y poner a Maduro en un avión».
Goudreau afirmó que fue el líder de la oposición venezolana respaldado por Estados Unidos, el autoproclamado «presidente interino» Juan Guaidó, quien firmó el contrato para la misión con él y no pagó, una afirmación que Guaidó ha negado. Berry, cuando se les preguntó por qué se entrenaron para su fallida misión de secuestro en un área «predominantemente operada por narcotraficantes», indicó que «no entendían ni sabían» que viajarían a «esta área de narcotraficantes».
Según Maduro, un narcotraficante conocido como Doble Ruedas era dueño de la granja en Colombia que fue el punto de partida de la misión. Berry comentó que Ruedas «estuvo en múltiples ocasiones con Sequea y Pimienta», refiriéndose al Capitán Antonio José Sequea y al Capitán Víctor Pimienta, quienes fueron capturados junto con los otros golpistas y se cree que lideraron la invasión. «Sí, Doble estuvo en varias ocasiones con Sequea y Pimienta. Por lo que conocieron, no sé exactamente, pero me reuní varias veces por lo que sé en La Guajira», afirmó Berry.
