Un juez mexicano, ordenó que tres funcionarios de inmigración mexicanos, un guardia de seguridad privada y un migrante venezolano sean detenidos para ser investigados en relación con un incendio de migrantes en un centro de detención en el norte de México que mató a 40 migrantes y refugiados.
Las cuatro personas responsables de la seguridad en las instalaciones de Ciudad Juárez serán detenidas por cargos de homicidio por omisión. Además de causar lesiones, mientras que el venezolano, que presuntamente provocó el incendio de migrantes, enfrenta cargos de homicidio y lesiones. Según información del consejo de la judicatura federal de México.
Un video de una cámara de seguridad dentro de la instalación muestra a los guardias alejándose cuando comenzó el incendio de migrantes el lunes pasado. La celda incendiada albergó a migrantes y refugiados y no hace ningún intento de liberarlos.
No estaba claro si esos guardias tenían llaves de las puertas de las celdas. Durante el incendio de migrantes, más de dos docenas de migrantes y refugiados resultaron gravemente heridos en el incendio.
Sería un venezolano, quien inició el incendio de migrantes en las instalaciones en medio de una protesta
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, prometió que no habría «impunidad» para los responsables del incendio en un centro de detención. Este, dejó decenas de migrantes muertos, mientras grupos de derechos humanos exigen respuestas y piden rendición de cuentas por el incendio fatal de esta semana.
«No ocultaremos nada y no habrá impunidad», señaló López Obrador durante su conferencia de prensa diaria el miércoles. Aquellos que hayan sido encontrados responsables de «causar esta dolorosa tragedia serán castigados de conformidad con la ley», afirmó el líder mexicano.
El incendio estalló el lunes por la noche en un centro de detención en Ciudad Juárez, una ciudad en el norte de México al otro lado de la frontera con Estados Unidos desde El Paso, Texas. Los defensores de los derechos humanos afirman las crecientes restricciones que enfrentan los solicitantes de asilo con destino a EEUU en la frontera sur del país con México.
Las circunstancias exactas del incendio siguen sin estar claras, pero López Obrador indicó el martes que el incendio fue iniciado por migrantes que protestaban por la decisión de deportarlos a sus países de origen.
El centro de detención albergaba a 68 migrantes de América Central y del Sur, dijo el Instituto Nacional de Migración de México.
