Denis Hernández prefiere morir que regresar a su país
Un migrante cubano se ha «crucificado» a sí mismo en Chiapas para protestar por las deportaciones arbitrarias y pedir un paso seguro a las demandas de los migrantes, por más de tres horas Denis Hernández Barona, se encadenó a si mismo a una cruz de madera fuera de una oficina del instituto nacional de inmigración, INM, cerca de la frontera entre México y Guatemala en Tapachula para llamar la atención sobre lo que explicó que era una situación calamitosa para los migrantes.
Hernández también comenzó una huelga de hambre la semana pasada en protesta contra un reciente aumento en las deportaciones, diciendo que preferiría morir antes de regresar a Cuba.
El mártir cubano, llamó al gobierno federal mexicano, a no deportar a los inmigrantes cubanos a la luz de la opresión política que enfrentan en su país de origen y demandó que las autoridades en su lugar conceden a los refugiados un pase de salida de 20 días para salir de México y pedir asilo en los Estados Unidos.
También denunció las tácticas usadas por las autoridades de inmigración para atraer a los migrantes, «muchos de los que fueron deportados en los últimos días fueron víctimas de una trampa, porque cuando entraron a la estación de inmigración para recibir sus pases de salida, fueron conducidos en autobuses en medio de la noche para ser cargados en aviones y enviados a Cuba».
En una semana, el INM ha deportado a 123 inmigrantes haitianos, 71 cubanos, activistas afirman que los migrantes de ambos países del Caribe enfrentan la persecución política del gobierno cubano y hay dificultades económicas luego de la vuelta a sus lugares de origen, lo que violaría los acuerdos internacionales sobre la protección a los migrantes.
El cubano pide sea derogados los planes del INM, que violan los derechos humanos
Actualmente, cientos de inmigrantes de América Central, Cuba, Haití y varios países africanos siguen acampados fuera de la oficina de inmigración en Tapachula, el 1 de abril, el INM implementó una medida de emergencia para emitir un número limitado de visas humanitarias, dando prioridad a mujeres, niños y ancianos mayores de 65 años.
Otros migrantes también protestados ayer y quemaron efigies de Donald Trump, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador y la secretaria de gobernación Olga Sánchez Cordero.
El presidente de la organización de defensa de los derechos de los inmigrantes acusados la semana pasada del aumento de deportaciones que se realizaron en respuesta a la presión de los Estados Unidos, contra México y contra el gobierno cubano.
Wilner Metelus, también cubano, afirmó que la situación era particularmente injusta para los haitianos debido a la situación económica y política de su país, «creo que estas deportaciones están sucediendo debido a la presión política sobre México, del presidente Donald Trump, pero me parecen que estas decisiones están mal y son discriminatorias».
Metelus, denunció numerosos casos en que inmigrantes haitianos fueron engañados por funcionarios de inmigración, que les prometieron visas humanitarias que nunca se materializaron.
Según las estadísticas federales, 13 mil 643 migrantes indocumentados fueron deportados de México en los primeros dos meses de este año, mientras que más de 30 mil fueron detenidos en los primeros tres meses, una cifra que ha aumentado considerablemente desde enero, cuando 7 mil 500 ilegales migrantes fueron detenidos.
