Colombia entre pobreza extrema, desempleo y desigualdad, va a elecciones presidenciales

El país que se jacta de poseer una de las economías más estables de américa del sur, el 27 de mayo Colombia efectuará su primera vuelta electoral para elegir nuevo presidente, La nación cafetalera posee un patrón de más de 36 millones de electores que podrán dar su opinión en más de 11.000 puestos de votación en ese país a lo largo de otras 70 naciones.

De los 49.583.637 colombianos que habitan en su territorio y en el exterior, algo más de 36 millones podrán elegir de entre los cinco candidatos que se disputan la silla del Palacio de Nariño, el candidato que resulte ganador en la primera vuelta, se enfrentara al balotaje electoral, este deberá enfrentar una extensa serie de retos de ámbito político y económico, pero el más preponderante de todos, será enfrentarse al tema de la discriminación social y del aumento desmedido de la pobreza, el desempleo y la desigualdad en su suelo patrio.

Colombia afronta dificultades desde todos lados

De acuerdo con la Cepal, Comisión Económica para América Latina y el Caribe, pobreza extrema se entiende como la situación en la que no se dispone de los recursos para satisfacer al menos las necesidades básicas de alimentación, y según ha contabilizado esta organización, Colombia es el tercer país con el mayor número personas en situación de pobreza extrema después de México y Brasil.

Según estadísticas del DANE, Departamento Administrativo Nacional de Estadística de Colombia, la tasa de desocupación en suelo colombiano es de 11,8% hasta enero del presente año y a pesar de que el nivel de ocupación ha crecido en 111 mil puestos de trabajo más, esta cantidad, apenas alcanza para cubrir el crecimiento de la población que buscó ingresar al mercado laboral que se ha estimado en unos 133 mil colombianos desempleados llega a 2.878.203 en todo el país y aunque en las ciudades más importantes la tasa de desempleo se sitúa en 13,4% y la cantidad de ocupaos ha caído en más de 183 mil personas.

Esto está afectado directamente por el descalabro de la economía de frontera que ha dependido históricamente de los dineros procedentes de Venezuela y Ecuador y del tránsito de migrantes desde estos países, que hasta hace menos de 5 años hacían comercio constante con las ciudades fronterizas de Colombia, Cúcuta, Maicao, Puerto Santander y Pastos y que, en este momento, por el deterioro de sus propias economías huyen hacia Colombia buscando mejorar sus ingresos.

Para engrosar las malas estadísticas que enfrentará el próximo presidente neogranadino, el Banco Mundial ha ubicado a Colombia como el segundo país más desigual en Latinoamérica y ha subido dos escaños para situarse como el séptimo a escala mundial. Esta brecha de desigualdad, no se ha mantenido en el tiempo, sino que ha ido acrecentándose y en este momento el 10% de la población de estrato 1 y 2, es decir la población más rica, tiene un ingreso 4 veces mayor al 40% de los estratos 5 y 6, los más pobres.

Brayan Salazar del partido Verde, ha comentado que, “470 mil personas no están accediendo a la educación. La desigualdad en las zonas rurales también es algo muy complejo, solo el 25% de los que habitan son dueños de la tierra. La desigualdad viene de la tradición política en la que estamos hoy en día”, esto lo ha afirmado en un Foro hecho en la Universidad de Caldas en el pasado més de febrero.

“Sin lugar a duda, la pobreza y la desigualdad en el país tienen que ver con las decisiones de quienes han estado en el gobierno, 4 de cada 10 colombianos están entre la pobreza extrema, el promedio de ingresos es de 492 mil pesos, Colombia es el tercer país más desigual del mundo», ha explicado.