La pandemia dio a luz más millonarios y mató a los pobres
Al inicio de esta catástrofe mundial, parecía que había solidaridad. Pero eso fue solo al principio. Ahora los millonarios toman las riendas del planeta y no miran a los pobres que quedan detrás.
A medida comienza en el tercer año de esta cruel pandemia y en medio de la agitación de ómicron, todavía se trata de imaginar la nueva normalidad, pero sin la carga de los pobres.
Cuando la pandemia golpeó por primera vez, ricos y pobres se unieron en el miedo. Políticos poderosos denunciaron el egoísmo nacionalista, reprendieron la conducta corporativa «codiciosa como el infierno» y prometieron que una vacuna sería un bien público.
Mientras lloraban a todos los 19 millones de vidas perdidas, se retoma la codicia que estuvo ocupada en el trabajo. Para ellos, los pobres no existes ya.
Esto ya no es rico contra pobres, son los súper ricos contra todos los demás
Ahora en 2022 presenciando el mayor aumento en la riqueza multimillonaria desde que comenzaron los registros. Un multimillonario fue creado cada 26 horas durante esta pandemia.
Solo la riqueza de los 10 hombres más ricos del mundo se duplicó, aumentando a una tasa de 15 mil dólares por segundo. Pero el Covid-19 dejó al 99 por ciento de la humanidad más pobres que antes.
Nuestro malestar es la desigualdad. La desigualdad de los ingresos es ahora un indicador más fuerte de si morirás de Covid-19 que la edad. En 2021, millones de personas murieron en países con escaso acceso a las vacunas.
Los monopolios farmacéuticos, protegidos por países ricos, estrecharon su suministro. Acometimos nuevos contratos multimillonarios de vacunas en la espalda y negaron a miles de millones de personas el acceso a las vacunas.
Debido a que la desigualdad perjudica a todos, se está en riesgo de las variantes que inevitablemente surgen del apartheid de vacunas hecho por los gobiernos.
De la misma manera, todos pierden en la democracia por el poder de la élite y por una crisis climática impulsada por el consumo excesivo del 1 por ciento superior. Uno que es responsable del doble de las emisiones del 50 por ciento inferior.
Los súper ricos están teniendo una gran pandemia. Gran parte de los billones de dólares, inyectados por los bancos centrales en los mercados financieros para salvar las economías, terminaron en los bolsillos de los multimillonarios.
Mientras la creciente privatización, la erosión de los derechos de los trabajadores, la desigualdad y la tasa de impuestos corporativos acabaron con la gente de menos ingresos.
Miles de millones de personas se enfrentan al impacto de la profundización de la desigualdad. En algunos países, las personas más pobres tienen casi cuatro veces más probabilidades de morir de Covid-19 que las más ricas.
El apartheid de las vacunas alimenta todas las desigualdades. Y ahora la perspectiva de austeridad respaldada por el FMI en más de 80 países amenaza con empeorar mucho las cosas.
