Corrupción en PDVSA: Desastre y transgresión
El posible final de Maduro pudiese desencadenará un huracán en américa
De producirse una transición pacífica dentro Venezuela la corrupción en PDVSA bajo una nueva administración, representaría un esfuerzo de reconstrucción titánica, donde directores y ejecutivos expertos en negocios ponen inmediatamente el cumplimiento en su lista de prioridades y colocarían auditores independientes para llevar a cabo una investigación interna exhaustiva.
Ahora imagine el escenario: la auditoría concluye que PDVSA lavó miles de millones de dólares y estuvo involucrado en sobornos y donaciones políticas ilegales en Venezuela y en toda América, una empresa de corrupción de jurisdicción múltiple que hace se hace par con Odebrecht o los Panamá Papers.
La evidencia sobre la corrupción a gran escala que involucra PDVSA ya abunda y desde hace varios años el departamento del tesoro norteamericano reveló que en un esquema de cambio de divisa entre los años 2014-2015, altos directivos pudieron lavar 1.2 mil millones de dólares, Odebrecht admitió haber pagado 788 millones de dólares en sobornos a lo largo de 14 años.
Experto y disidentes al gobierno de Nicolás Maduro, estiman que alrededor de 30 mil millones han desaparecido de PDVSA en los últimos años, pero la pregunta no es si el escenario anterior probablemente se materializaría, sino cuáles serán las repercusiones y consecuencias a escala global.
Pero, mientras que Washington reclama jurisdicción universal sobre todo asunto relacionado con la corrupción, la caída de la cleptocracia de Caracas, sea por interés o por conveniencia, se pueden desencadenar múltiples batallas judiciales dentro y fuera de EE.UU.
La corrupción en PDVSA tendrá repercusiones en todo el mundo
En este momento existe un caso importante de la ley de prácticas de corrupción en el extranjero o FCPA, en un tribunal federal que involucra agentes y contratistas de compras de PDVSA con sede en Houston y Florida.
En el escenario propuesto, las autoridades perseguirán la corrupción en PDVSA en terceros países, y en cualquier subsidiaria de la estatal, pues es probable que se haya hecho uso del sistema financiero norteamericano e incluso a través de Citgo.
Pero simplemente hacer caída y mesa limpia con la corrupción en PDVSA, pudiese transmitir un mensaje de impunidad y ni el gobierno de Trump, ni nadie en Washington tenderá a optar por una alternativa intermedia, como imponer un monitor independiente a la compañía.
Pero a la larga es mucho más incierto que las consecuencias políticas en los países donde se estableció la corrupción en PDVSA, tomarán el sentido, del escándalo de los Panamá Papers y Odebrecht, que hasta el momento han acabado con las carreras de cientos de personas.
Ejemplo de es la persecución de muchos es altos directivos de la estatal, que con o sin razón, han sido señalados de ser participes de la corrupción de PDVSA; casos como el de Nervis Villalobos, Raúl Gorrín o Víctor Cruz Weffer, a los que se les ha encontrado culpables, no se han resuelto del todo.
Y nombres como el de Rafael Ramírez o Eudomario Carruyo, han sido señalados y enlodados, sin encontrar pruebas que los inculpen, pero incluso a ellos se les mantiene bajo el escrutinio público, aun sin ser culpables de lo que se les acusa.
De Norteamérica a Argentina y de Rusia a Haití
Por ahora y a medida que surja la evidencia detallada de la empresa criminal en todo el mundo, le seguirá una volatilidad política significativa, creando una ventana a ese escenario es la actual crisis política en Haití, que fue desencadenada por un gran escándalo de corrupción que involucra a Petrocaribe, que comenzó en 2005.
En los países de Petrocaribe ideológicamente alineados con el chavismo, esta red de corrupción puede haber sido aún más extensa, donde el gobierno de Daniel Ortega de Nicaragua ha utilizado la opaca empresa conjunta Albanisa para distribuir 4 mil millones reportados a los leales sandinistas desde 2007.
En El Salvador, Alba Petróleos, es 60% propiedad de PDVSA y junto con Albanisa, fue sancionada por el departamento del tesoro en enero de 2019, ya que los partidarios del FMLN supuestamente utilizaron las ganancias de Alba Petróleos para financiar las campañas electorales del partido.
Con interacciones develadas en la banca suiza, española y norteamericana, la corrupción en PDVSA muy probablemente ha ido mucho más allá de Petrocaribe y será más evidente en Latinoamérica con casos como el de Argentina de 2018, donde un ex gerente de Conosur, la filial argentina de PDVSA, testificó que la compañía recibió pagos de PDVSA a partir de 3 millones por mes desde 2009.
A partir de 2013, se descubrió que recibió 1 millón de dólares por mes de 2014 a 2018, para pagar sobornos; al igual que en Brasil, donde la policía ha investigado el posible lavado de dinero por parte de PDVSA a través de las importaciones de equipos agrícolas brasileños a través de un plan que cobro 64 millones entre 2010 y 2014.
La novel corrupción en PDVSA y el gobierno de transición
Con la ayuda de los Estados Unidos, la asamblea nacional venezolana, a través de su presidente, el diputado Juan Guaidó, ha limitado e incautación los activos de Citgo y de varias transacciones de PDVSA en la banca internacional, aunque estas divisas están en un fondo norteamericano.
Pero el dinero robado a través de la corrupción en PDVSA y las arcas públicas involucran activos del gobierno venezolano en Suiza, en veinte cuentas bancarias de EE.UU., y en 152 bancos en América, Europa y Asia que actualmente se están congelando a medida que se actúa.
Este dinero, planea ser utilizado por la oposición para financiar la recuperación de Venezuela, en la que está ayudando activamente Washington, pero los líderes de este movimiento, ya han sido señalados de malversación de fondos, un caso que se encuentra en desarrollo.
Pero cuando la transición democrática finalmente se suceda en Venezuela, el colapso de la máquina de corrupción en PDVSA, ese aparato multinacional representará un desafío adicional para las nuevas autoridades en Caracas.
Y serán innumerables las batallas legales en los tribunales internacionales sobre lavado de dinero, sobornos y otras formas de corrupción que probablemente demorarán años en resolverse, por lo que el próximo gobierno venezolano enfrentará una tormenta política en toda la región causada por la revelación de los secretos sucios de la corrupción en PDVSA.
