Reinicio de operaciones entre PDVSA y Chevron

Estas acciones están limitadas a las decisiones de Trump sobre las sanciones
La noticia sobre el reinicio de las operaciones entre PDVSA y Chevron en las instalaciones de mezcla de su empresa conjunta PetroPiar llega inmediatamente después de un informe sobre el reinicio de las operaciones en PetroSinovensa, la empresa conjunta de la petrolera estatal venezolana y la CNPC de China, al igual en PetroSinovensa, la planta de mezcla de PetroPiar se cerró debido a las excesivas reservas de crudo.
Las reservas excesivas de crudo son uno de los mayores problemas de Venezuela, causados por las sanciones de Estados Unidos contra su compañía petrolera, ahora que las reservas han disminuido para ambas plantas mejoradoras, se llevó a cabo el reinicio de las operaciones, lo que debería ser una buena noticia para PDVSA.
Los mejoradores que han hecho reinicio, son las instalaciones en las que el crudo superpesado de Venezuela de la faja del Orinoco, denominado Merey, se liga con crudo ligero para que sea lo suficientemente líquido como para cargarlo en camiones cisterna, después del reinicio, las plantas de PetroPiar y PetroSinovensa están produciendo a una tasa de alrededor de 100 mil bpd de crudo.
Sin embargo, aquí la empresa estatal venezolana enfrenta un nuevo desafío, pues los operadores de envío no están dispuestos a arriesgarse a atraer la ira de Washington al suministrar cisterna a PDVSA, ya que en agosto Estados Unidos amplió el alcance de sus sanciones contra Venezuela a cualquiera que haga negocios con él y esté expuesto al sistema financiero estadounidense.
Ahora, los comerciantes de productos básicos también se están alejando del crudo venezolano, por lo que el problema de encontrar compradores para su crudo producido del reinicio de las instalaciones de mezcla continúa.
El ministerio de petróleo y los funcionarios de PDVSA culpan a las sanciones de Estados Unidos por los cuellos de botella que han obligado a la compañía a reducir la producción de crudo en numerosos campos en Venezuela desde principios de agosto, incluidos Lagunillas, Bachaquero, Tía Juana y Boscán en el estado de Zulia.
La operación tuvo su reinicio después de que PDVSA trasladó más de 4 millones de barriles de crudo acumulado en el complejo Jose en el este de Venezuela a su complejo de refinación de CRP de 940 mil b/d en el oeste de Venezuela y a Cuba.

El reinicio se emprende en un momento crucial PDVSA, mientras que Chevron enfrenta las sanciones
A principios de este año, fuentes no identificadas informaron que PDVSA, estaba cargando su petróleo en embarcaciones más pequeñas, para burlar el bloqueo, pero esto cuesta más, lo que se suma a la carga financiera ya significativa de la compañía.
PDVSA busca liberar entre 7 y 8 millones de barriles de almacenamiento en su división Este y, al mismo tiempo, ayudar a aliviar una grave escasez de petróleo en Cuba, el aliado político cercano de Venezuela.
Las exportaciones de PDVSA se han visto limitadas por las sanciones de Estados Unidos que han alejado a la mayoría de los compradores tradicionales, aunque algunos como Reliance de India y Repsol de España todavía están refinando el crudo venezolano.
Si Washington no extiende la exención de sanciones para Chevron, la compañía tendrá que abandonar Venezuela, al igual que Halliburton y Schlumberger, lo que probablemente perjudicará gravemente la producción, estas exenciones expiran a finales de este mes.
La falta de tanqueros para cargar en terminal de Jose, que representa hasta el 75% de los envíos totales de exportación de PDVSA, copó la capacidad operativa de almacenamiento en tierra firme y flotante de Venezuela de casi 38 millones de barriles a fines de septiembre, según el ministerio de petróleo y funcionarios de la división oriental de PDVSA.