Migración Venezolana acelera economía colombiana

La inyección de capital y mano de obra activa el mercado interno

La migración desde Venezuela ha modificado la oferta de factores productivos en la economía y aunque ha significado uno de los retos más importantes del gobierno de Iván Duque, se debe tomar en cuenta la mayor disponibilidad de mano de obra y de capital humano generada por los inmigrantes venezolanos, lo que ha derivado en que la economía de Colombia creció rápidamente en cuatro años a medida que la migración el acelerado crecimiento del crédito impulsan la demanda de los consumidores.

Según informes publicados por el FMI y el banco mundial, el producto interno bruto en Colombia, se expandió 3.3% en los tres meses anteriores a septiembre, en comparación con el mismo período del año anterior, lo que está estaba exactamente en línea con los pronósticos de analistas y especialistas de economía.

Colombia ha resistido la tendencia de los mercados emergentes de recortes de tasas de interés a medida que su economía supera a sus pares este año, todos los demás bancos centrales importantes con metas de inflación en América Latina han reducido las tasas de interés en los últimos meses a medida que sus economías se desaceleran, pero en Colombia la migración ha impulsado el PIB en 0.6% desde el segundo trimestre.

Por lo que el FMI pronostica que Colombia crecerá 3.4% en 2019, a una tasa preferente y a mayor velocidad que Perú, Chile, Brasil, México o Argentina, cuando la tasa fijada para toda América Latina y el Caribe, es tan sólo en promedio de 0.2%.

Derivada de la crisis venezolana, Colombia ha recibido alrededor de 1.5 millones de migrantes desde Venezuela en los últimos años, y miles más llegan cada día, esta condición sin precedentes, puede ayudar a explicar por qué Colombia tiene la combinación inusual de un fuerte crecimiento y un mercado laboral débil, ya que muchos migrantes encuentran trabajo en el sector informal, indicó Paulo Mateus, economista de Goldman Sachs.

La migración venezolana, ha traído más beneficios que desventajas a los países receptores

Economistas y especialistas del banco de Bogotá y el banco Bilbao Vizcaya Argentaria, también afirmaron que la migración probablemente explica la demanda de consumo relativamente fuerte, «Colombia ha recibido un fuerte choque migratorio», señaló Mario Castro, estratega de BBVA, «si bien la población migrante es muy pobre, no se muere de hambre y consume, el consumo de los hogares es lo que explica el crecimiento de Colombia».

La migración desde Venezuela, no está acompañada de miseria, como muchos ha creído, pues los venezolanos, viajan de frontera en frontera con recursos propios y esta inyección de capital, aunque somera, se puede ver en todos los lugares a los que llegan.

El sector minorista, mayorista y de transporte se expandió 5.9% mientras que los servicios financieros crecieron 8.2%. Esto ayudó a compensar los débiles sectores manufacturero y petrolero, y una contracción en la actividad de la construcción.

Desde que se inició la diáspora, muchos pensaron que la migración venezolana, significaría que los estados receptores, se encontrarían inundados de gastos para la manutención y asistencia de los movilizados, pero la experiencia a demostrado, que los venezolanos, acostumbrados al trabajo y al emprendimiento, no sólo han generado medios legales de subsistencia, sino que también han creado empleo para los locales.

Desde antes que comenzara la migración forzada, ya habría comenzado una discreta migración de inversionistas, que hoy en día, forman parte del aparato productivo en Colombia, Perú, Ecuador, Chile y Argentina y que, en el caso neogranadino, han impulsado la balanza de pagos en más de 989 millones de dólares.

La otra gran oferta que la migración venezolana a brindado es la de mano de obra calificada de alto nivel, en Venezuela como en muy pocos países de Latinoamérica, las ofertas de empleo eran muy reducidas y los venezolanos competían en calidad, lo que impulsó a muchos a realizar estudios universitarios y de alto nivel y ahora estos cerebros, se han esparcido por todos los países receptores, con mano de obra calificada y barata.