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Bolsonaro amenaza la democracia

Crecen las advertencias internacionales por la amenaza a la democracia en Brasil

Las advertencias internacionales sobre los esfuerzos para «subvertir la democracia» en Brasil están creciendo. A sólo, pocos días antes de que los votantes se dirijan a las urnas para una elección presidencial, se profundizan las divisiones en la nación sudamericana.

El titular de la derecha Jair Bolsonaro sugirió que puede rechazar los resultados si pierde. Mientras, la mayoría de las encuestas de opinión lo muestran detrás de su rival de izquierda, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.

El Senado de Estados Unidos aprobó el miércoles por la noche una resolución que respalda una elección libre en Brasil. Denunciando «los esfuerzos para incitar a la violencia política y socavar el proceso electoral en la democracia del país».

La medida simbólica, adoptada por unanimidad, pide al gobierno de Estados Unidos que reconozca «inmediatamente» el resultado de la votación del 2 de octubre. Siempre que los observadores internacionales determinan que es justo.

También se instó a la administración Biden a «revisar y reconsiderar la relación entre Estados Unidos y cualquier gobierno que llegue al poder en Brasil. A través de medios anti democracia, incluido un golpe militar».

La pérdida de la democracia en Brasil.
Brasil estuvo bajo un gobierno militar autoritario de 1964 a 1985, y Bolsonaro, un ex capitán del ejército, expresa su admiración por el antiguo régimen, una «dictadura brutal» que actuó contra la democracia.

Lula promete proteger la selva tropical y tomar medidas enérgicas contra la minería y la tala ilegales si es elegido

La votación del domingo enfrenta a Bolsonaro contra Lula. Que esta semana tenía una ventaja de más de 13 puntos porcentuales. Varios otros candidatos también están buscando la presidencia. Si ninguno gana la mayoría de los votos, una segunda ronda de votación está programada para el 30 de octubre. Los candidatos están listos para un debate final más tarde el jueves.

Las elecciones polarizado fuertemente al país, con los partidarios de Bolsonaro pintando a su rival como comunista. Y los partidarios de Lula viendo al presidente como un radical de derecha. Una cosa que los votantes aquí tienen en común es que muchos, ven esta elección como una batalla crítica sobre el futuro de la democracia brasileña.

Durante meses, Bolsonaro hace acusaciones infundadas de que el sistema de votación electrónica de Brasil es vulnerable a un fraude generalizado. Unas, acusaciones que los grupos de derechos humanos temen que puedan estar preparando el escenario para que dispute los resultados para permanecer en el poder.

Otros expertos también expresan su preocupación de que los partidarios de Bolsonaro puedan salir a las calles en gran número. Tan pronto sepan que no es reelegido, y que la violencia política podría estallar.

Esta semana, docenas de legisladores europeos también instaron a la UE a «tomar medidas adicionales para dejar inequívocamente claro al presidente Bolsonaro. Además de su gobierno, que la constitución de Brasil debe ser respetada y los intentos de subvertir las reglas de la democracia son inaceptables».

Brasil estuvo bajo un gobierno militar autoritario de 1964 a 1985, y Bolsonaro, un ex capitán del ejército expresa su admiración por el antiguo régimen, que ha sido descrito como una «dictadura brutal» por grupos de derechos humanos.

Fuente
HRWOpenDemocracyAmbito

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