El ministro argentino de Hacienda Nicolás Dujovne y el presidente del Banco Central de la nación, Federico Sturzenegger, develaron los detalles del acuerdo a través del cual el fondo monetario internacional, FMI, la habría prestado a la nación del cono sur 50 mil millones de dólares para paliar la crisis económica en la que se encuentra inmersa al país, entre los compromisos adquiridos por el país sudamericano está el de cancelar la deuda en un plazo de 36 meses.
Esta mañana se llegó al acuerdo a través del cual el fondo monetario internacional, FMI, le otorgaría al gobierno de Argentina una ayuda crediticia de tipo “stand by” por 50 mil millones de dólares a un plazo de tres años, según ha informado el ministro Dujovne.
El déficit se deberá reducir en tres años
Entre las condiciones del acuerdo, está la de forzar la reducción del déficit fiscal, que se realizará de manera gradual y divididas en tres partes, la primera, del 2,7% del producto interno bruto o PIB, para este año, un 1,3% por ciento del PIB en 2019 y un equilibrio primario en 2020 contra el déficit previo de 1,2% por ciento y un superávit de 0,5 por ciento en 2021.
«En el acumulado de 2018-2021 esto significa una reducción acumulada del déficit de 3,1 por ciento del PIB, alrededor de 19.300 millones de dólares», explicó a través de un comunicado Dujovne.
El ministro a asegurado que durante los convenios que acuerdan la deflación del gasto oficial, se consideraron cláusulas de salvaguardas sociales que contemplan las retribuciones sociales como la «Asignación Universal por Hijo», con el hipotético propósito de mantenerla y hasta aumentarla.
Dujovne, también ha declarado que «lo que hemos logrado con el apoyo de la comunidad internacional es evitar una crisis y poder continuar con el proceso de crecimiento», afirmó.
Según ha expresado voceros del gobierno de Macri, los fondos estarán disponibles desde el 20 de junio y se prevé que en forma inmediata se concrete el primer desembolso por unos 15 mil millones de dólares destinados a robustecer las partidas presupuestarias y las reservas del Banco Central.
Se plantea ahora que las medidas económicas que el gobierno aplicará durante los próximos 36 meses que dura el acuerdo, fijan metas fiscales a partir de un déficit primario del 2,7% del PBI este año y del 1,3% en 2019, para llegar a equilibrio en 2020, y encontrarse ya en superávit de 0,5 % en 2021, estas medidas incluye metas de inflación, que debe seguir el Banco Central dentro de un régimen de tipo de cambio flotante: 17% para 2019, 13% para 2020 y 9% para 2021.
Hugo Vasquez, economista argentino ha comentado que, “el panorama no es bueno, el gobierno encontró cierto alivio para cumplir con los vencimientos de deuda a partir del espaldarazo que representa este mega préstamo”, aunque “en los próximos meses y años seguramente vamos a tener un muy bajo crecimiento, la inflación este año no da tregua (…) el menor crecimiento va a tener un menor nivel de consumo y por supuesto, alguna tendencia inflacionaria en lo que queda del 2018”, agregó.
