La selva alcanza un punto de inflexión, afirman especialistas
La selva amazónica se está moviendo hacia un «punto de inflexión» donde los árboles pueden morir en masa, señalan los investigadores. Un momento en el que hay que actuar o se causará su destrucción total.
Un nuevo estudio, sugiere que la selva tropical más grande del mundo está en un punto, en el que perdió su capacidad de recuperarse. Mientras, sigue recibiendo daños causados por sequías, incendios y deforestación.
Grandes franjas de la selva, podrían convertirse en sabanas escasamente boscosas. Un escenario que es mucho menos eficiente que el bosque tropical. Y no sólo para absorber dióxido de carbono del aire, sino al punto de no convertirse en desierto.
El bosque gigante atrapa carbono que de otro modo se sumaría al calentamiento global. A pesar, que estudios recientes, demuestran que partes del Amazonas llegaron al punto de emitir más dióxido de carbono del que se puede absorber.
El punto de no retorno, ya llegó, ahora hay que hacer control de daños
«Los árboles están perdiendo salud y podrían estar acercándose a un punto de inflexión, básicamente, una pérdida masiva de árboles», señala el Dr. Chris Boulton de la Universidad de Exeter.
Los hallazgos, basados en tres décadas de datos satelitales, muestran tendencias alarmantes en la «salud» de la selva amazónica.
Hay signos de una pérdida de resiliencia en más del 75% del bosque. Los árboles tardan más en recuperarse de los efectos de las sequías impulsadas en gran medida por el cambio climático. No sin dejar de lado, los impactos humanos, como la deforestación y los incendios.
Un círculo vicioso de daño podría desencadenar una «muerte», expresaron los científicos. Y aunque no está claro cuándo se podría alcanzar ese punto crítico, las implicaciones para el cambio climático, la biodiversidad y la comunidad local serían «devastadoras».
Una vez que comienza el proceso, predicen que podría ser cuestión de décadas antes de que una «parte significativa» del Amazonas se transforme en sabana. Un ecosistema muy diferente compuesto por una mezcla de pastizales y árboles.
«El Amazonas almacena mucho carbono y todo eso se liberaría a la atmósfera, lo que contribuiría aún más al aumento de las temperaturas y tendría efectos futuros en las temperaturas medias globales», explicó el Dr. Boulton, y agregó que detener la deforestación ayudaría a abordar el problema.
