Países recurren a la producción local de trigo, mientras los suministros mundiales se agotan
Antes de la operación militar de Moscú en Ucrania, la autoridad palestina recibía unas 75 mil toneladas de trigo, desde Europa del Este por año. El estallido de las hostilidades detuvo los suministros, elevando el precio del pan y los productos relacionados con el trigo.
La crisis en Ucrania podría estar a más de mil kilómetros de distancia de Cisjordania, pero los palestinos que viven allí están sintiendo el impacto del conflicto, sobre todo y con más presión, en la carencia de alimentos y en especial de trigo.
El precio de los productos relacionados con el pan y el trigo se disparó en todo el mundo desde el 24 de febrero. Cuando Rusia lanzó su operación militar en Ucrania; ambos países se encontraban entre los principales exportadores de granos del mundo.
Ucrania y Rusia desempeñan un papel importante en los mercados mundiales de alimentos. Son exportadores netos de varios de los principales cultivos de cereales. El trigo, maíz y cebada, se encargan de las mesas en el planeta.
La ruptura de la cadena de suministro hace escasear el trigo y otros cereales
Ambos también son exportadores dominantes de aceite de girasol, uno de los aceites vegetales dominantes del mundo. Algunos países, como la India, dependen en gran medida de las importaciones de aceite de girasol para el suministro nacional de alimentos.
«Antes de los acontecimientos en Ucrania, las importaciones anuales de trigo en Palestina ascendían a unas 35 mil y 40 mil toneladas desde Rusia y Ucrania, respectivamente”.
Ahora, en medio de las hostilidades, ese suministro de trigo se está agotando. Según las estimaciones, Palestina tiene alrededor de 15 mil toneladas de trigo almacenadas, una cantidad, admite, que puede durar «solo unos pocos meses».
Para abordar el problema, muchos países, se esfuerzan por encontrar soluciones alternativas. Una de ellas es la producir trigo localmente. Pero los agricultores no tienen reservas suficientes de semillas de trigo, maíz o arroz.
En este momento, el banco de semillas de Palestina, tiene unos 2 mil tipos de semillas. Algunos de los granos de trigo se recolectaron internamente, mientras que otros vinieron del extranjero, pero tienen una cosa en común. Todos fueron mejorados para que pudieran resistir el cambio climático en la región.
Y aquí está esa trampa: la cantidad que el banco podría producir solo proporcionaría del diez al quince por ciento de la demanda total. Parte de la razón de los bajos números es la ausencia de una cantidad significativa de semillas de trigo.
Egipto, es el principal importador de trigo ruso del mundo. Recientemente, se informó que sus compras de grano ruso aumentaron a pesar de la operación militar de Moscú en Ucrania. Por lo que, Palestina se acercó a El Cairo con la esperanza de asegurar una parte de sus provisiones.
Las autoridades de Ramallah también se acercaron a Canadá y Australia, pero el problema es que el transporte de granos desde esos países requiere períodos de tiempo muy largos.
