La luna de miel de Lula de Brasil con inversionistas para iniciar la reconstrucción termina antes de comenzar
Existe un creciente pesimismo de los inversores de que el presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, gobierne con disciplina fiscal. El jefe del banco central del país comparó una venta masiva del mercado con un «momento Liz Truss para Brasil».
La moneda real de Brasil y el índice bursátil Bovespa perdieron aproximadamente un 4 por ciento el jueves. Mientras que, la breve luna de miel de Lula con los inversores se agrió por su compromiso público de priorizar el gasto social sobre la integridad fiscal.
El real brasileño recuperó las pérdidas el viernes, con un dólar cerrando la sesión con una caída de 1,24 después de un día volátil de negociación. Pero, para Lula, las acciones subieron más del 2 por ciento.
A pesar de esas ganancias, el nerviosismo se mantuvo, y los inversores pidieron a Lula que restaurara reglas firmes para el gasto público. Sobre todo, después de los desembolsos significativos del presidente Jair Bolsonaro durante la pandemia y la campaña electoral.
Se necesita un ministro de Finanzas para explicar el pensamiento político del presidente Lula
El jefe del banco central, Roberto Campos Neto, hablando en un evento en Sao Paulo, explicó que la derrota del jueves era el último ejemplo de los mercados que exigen disciplina fiscal. En medio de un contexto global desafiante de alta inflación, bajo crecimiento y poco apetito por el riesgo.
«No sé si ese fue un momento de Liz Truss para Brasil, pero fue una clara demostración de la sensibilidad de los mercados al tema fiscal», indicó Campos Neto. Refiriéndose a la ex primera ministra del Reino Unido que renunció después de que los mercados castigaron su impulso por recortes de impuestos no financiados.
Citigroup Inc expresó en un informe que los inversores podrían haberse equivocado al pensar que Lula seguiría una agenda fiscal ortodoxa. Mientras, agregó que el banco había decidido reducir su exposición al riesgo en Brasil ante esta reevaluación.
«El mercado parecía haberse convencido de que el presidente sería fiscalmente ortodoxo. Las noticias más recientes ahora arrojan dudas sobre esta hipótesis», escribió Dirk Willer, jefe de estrategia de mercados emergentes de Citi Research, el jueves por la noche.
Milton Maluhy Filho, presidente ejecutivo del mayor prestamista de Brasil, Itaú Unibanco ITUB4.SA, expresó el viernes que era necesario encontrar un equilibrio entre el gasto social y poner las finanzas públicas en orden.
«Creemos que la responsabilidad fiscal y la responsabilidad social deben ir de la mano», señaló en una conferencia telefónica.
Los inversores e incluso los aliados al presidente también expresan su preocupación por los retrasos en el nombramiento de su ministro de Finanzas. Da Silva afirmó que solo nombrará a su gabinete una vez que regrese de la cumbre climática COP27 en Egipto.
