El mundo parece estar en camino de un evento repentino de calentamiento estratosférico dadas las circunstancias
Hay un gran interés en las últimas semanas en el tan esperado evento de calentamiento estratosférico repentino o SSW, que solo comenzó esta semana, pero ahora está en marcha.
El fenómeno de calentamiento estratosférico repentino está vinculado al vórtice polar. Un área de baja presión a través del Polo Norte que se forma dentro de la estratosfera durante el otoño, a medida que las temperaturas caen en picado en ausencia de radiación solar.
Los eventos de calentamiento estratosférico son muy comunes y ocurren dos de cada tres inviernos. No está claro cómo afectará el cambio climático a estos eventos en el futuro. A medida que el vórtice se desarrolla durante el otoño y el invierno, los vientos estratosféricos del oeste aumentan en fuerza.
Pero en el caso de un episodio de SSW, el calor estratosférico aumenta rápidamente en el espacio de unos pocos días, lo que lleva al debilitamiento o incluso a la inversión de estos vientos.
El fenómeno de calentamiento estratosférico está relacionado con el vórtice polar
Los vientos medios zonales a una presión de 10hPa, de unos 30 km de altura, giraron en dirección este el 15 de febrero del miércoles. Desplazando significativamente el vórtice polar lejos del Polo Norte. Se pronostica que el vórtice y los vientos zonales se mantendrán mucho más débiles de lo normal durante el resto de febrero y la primera quincena de marzo.
Las consecuencias de este calentamiento se extenderán lentamente a la troposfera y pueden, con el tiempo, interrumpir la corriente en chorro que influye en nuestro clima en la superficie.
Una corriente en chorro debilitada puede ayudar en el desarrollo de grandes áreas de «bloqueo» de alta presión. Si se acumula alta presión en Escandinavia, puede alimentar aire polar muy frío desde el este hacia Europa occidental y hacia el Reino Unido.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que no todos los eventos de SSW son iguales, y no todos conducirán a condiciones de frío. Los efectos eventuales de tales eventos estratosférico, generalmente no se experimentan hasta dos o tres semanas después de que comienzan.
Mientras que, el intenso calor afectó a gran parte de Argentina durante la primera quincena de febrero. En lo que fue la octava ola de calor del país este verano. Esto siguió al período más cálido de noviembre a enero desde 1961. El Servicio Meteorológico Nacional de Argentina informó que las temperaturas promedio fueron 1.7°C más altas de lo normal.
A principios de febrero, las temperaturas más altas se localizaron en la región de la Patagonia en el sur de Argentina. Pero, gradualmente se extendieron hacia el norte desde el 9 de febrero. Al menos 27 ciudades rompieron récords de temperatura durante el último período.
