Los precios mundiales vuelven a subir, avivando el temor de una crisis
Los precios mundiales de los alimentos extendieron su repunte al más alto en casi una década, aumentando el temor sobre las abultadas facturas de comestibles a medida que las economías luchan por salir de la crisis del Covid-19.
Un indicador de las Naciones Unidas de los costos mundiales de los alimentos subió por 12º mes consecutivo en mayo, su tramo más largo en una década.
El continuo avance produce el temor de acelerar una inflación más amplia. Lo que complicará los esfuerzos de los bancos centrales por proporcionar más estímulo.
La sequía en las principales regiones de siembra está paralizando los cultivos, desde el maíz hasta el café, y existe el temor, de que el crecimiento de la producción de aceite vegetal se desacelere rápidamente.
El temor de una crisis alimentaria, ya está en ciernes
Eso está aumentando los costos para los productores de ganado y hay temor de agotar aún más las reservas mundiales de granos. El aumento ha despertado recuerdos de 2008 y 2011, cuando los picos de precios llevaron a disturbios por alimentos en más de 30 naciones.
«Tenemos muy poco espacio para cualquier choque de producción. Tenemos muy poco espacio para cualquier aumento inesperado de la demanda en cualquier país», señaló la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación.
«Cualquiera de esas cosas podría desatar el temor y hacer subir los precios más de lo que están ahora, y entonces podríamos empezar a preocuparnos por la inflación».
El dolor podría ser particularmente pronunciado en algunas de las naciones más pobres que dependen de las importaciones. Estos pequeños países que tienen poco poder adquisitivo y redes de seguridad social limitados.
Los cinco componentes del índice aumentaron durante el mes de mayo. Con un avance liderado por los aceites vegetales, los cereales y el azúcar más caros, que imprime temor a los productos manufacturados.
El problema del hambre en el mundo ya ha alcanzado su peor momento en años, por la pandemia. Que exacerba las desigualdades alimentarias, agravando el clima extremo, el temor desatado sobre el mundo generará más conflictos políticos.
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