Mientras se empequeñece el mercado petrolero, Maduro hace ofertas de crudo
El jueves pasado, el fiscal general de los Estados Unidos William Barr anunció que el departamento de justicia había ofrecido recompensas por información sobre cinco altos funcionarios en el gobierno de Venezuela y del presidente Nicolás Maduro, que incluían 15 millones de dólares por el propio mandatario, basado en cargos de narcotráfico.
El presidente venezolano Nicolás Maduro ha advertido a las autoridades de Colombia y Estados Unidos enfrentará consecuencias si reprimen a la élite política de su país, “Si un día los imperialistas y la oligarquía colombiana se atreven a tocar un solo pelo, se enfrentarán a la furia bolivariana de Venezuela, que los eliminará a todos», afirmó Maduro en un discurso en Caracas a principios de la semana.
Desde 2018, Estados Unidos introdujo sanciones económicas contra Caracas en un intento de echar abajo al presidente Nicolás Maduro y la evolución y los factores mundiales relacionados con los precios tuvieron un efecto dramático en la industria petrolera de Venezuela, que ahora ha almacenado una cantidad excesiva y está a tope de su capacidad.
Venezuela ha comenzado a vender petróleo por menos de 5 dólares por barril, reveló El Nuevo Herald, citando expertos en la industria familiarizados con el mercado, mientras tanto, el precio del crudo Brent se fijó en aproximadamente 25 dólares por barril al 27 de marzo.
Venezuela sólo cuenta con la asistencia de Rusia, China y Cuba, para defenderse del COVID-19
Según los expertos citados por el medio derechista, Venezuela ha sido duramente golpeada por las sanciones estadounidenses, la actual pandemia de coronavirus y los desacuerdos económicos entre Rusia y sus socios de la OPEP+. Russ Dallen, socio director del banco de inversión Caracas Capital Markets, afirmó al periódico que «nadie quiere tocar» el petróleo venezolano para evitar ser sancionado por la administración Trump.
El país se ha visto obligado a acumular petróleo sin poder venderlo abiertamente en el mercado, y ha reducido la producción a unos 450 mil barriles por día, según los informes. Más, sin embargo, Venezuela mantiene un extenso comercio de petróleo con Cuba, reducir el precio de su crudo para atraer nuevos compradores puede ser la única opción que queda para Maduro.
Las sanciones económicas, incluyendo las que afectan a la industria petrolera nacional, fueron introducidas contra Venezuela por la administración Trump en un esfuerzo por vencer al actual presidente Nicolás Maduro, y desde entonces, Washington ha impuesto una serie de sanciones a las empresas que supuestamente están haciendo negocios con compañías petroleras relacionadas con Venezuela, añadiendo más recientemente TNK Trading International S.A. a la lista.
La administración Trump afirma constantemente que, el supuestamente actual presidente de la asamblea nacional de Venezuela, Juan Guaidó, es el líder de Venezuela, mientras que recientemente presentó cargos de narcotráfico contra Nicolás Maduro y ofreciendo una recompensa considerable por su captura.
El estado actual del mundo, sigue golpeando al gobierno socialista
Maduro, describió a Donald Trump, como un «vaquero racista» y un «ser humano miserable», acusando al presidente norteamericano de administrar las relaciones internacionales «como un artista de extorsión de la mafia de Nueva York que una vez fue un jefe de bienes raíces».
Según funcionarios estadounidenses, Maduro era supuestamente el líder de un grupo de tráfico de cocaína llamado «El Cártel de los Soles», que involucraba a altos políticos y militares y judiciales venezolanos, los acontecimientos se desarrollan en medio de tensas relaciones entre Estados Unidos y Venezuela que se deterioraron significativamente después de que Washington reconociera a Juan Guaidó.
Mientras que varios estados occidentales también apoyaron a Guaidó, Maduro llamó al autodenominado presidente un «títere estadounidense», apoyado por Rusia, China, Turquía y otros países que aún lo reconocen como único presidente legítimo de Venezuela, Moscú, a su vez, subrayó que el «estatus presidencial» de Guaidó era inexistente.
