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La tibia moderación del sesgo en las redes sociales

Hay una conveniente mesura en las principales plataformas de redes

Las fuentes de noticias ahora con rango de algoritmos, se introdujeron como una forma de evitar perder información en medio del flujo interminable de noticias. Pero, al mismo tiempo, a medida que las redes toman el control de lo que los usuarios ven primero, se enfrentan a acusaciones de moderación sesgada.

Un acalorado debate sobre el llamado Shadowban se está librando. Desde las elecciones de 2016, los republicanos afirman que las redes sociales estaban silenciando las voces conservadoras.

Ahora, la moderación abierta, desde la desinformación hasta el discurso de odio, es comprensible. Y aunque estas políticas enfrenten críticas, los Shadowban son difíciles de rastrear, porque se esconden bajo las políticas y protocolos de moderación de las plataformas de redes sociales y sus algoritmos sin revelar.

Los problemas más comunes que enfrentan los usuarios bajo los Shadowbans, son que su nombre, no aparece en las sugerencias de búsqueda en las redes. También, la disminución en los seguidores y el bloqueo de me gusta o respuestas.

Las empresas tecnológicas afirman, que reducen la actividad de algunas cuentas, a las que señalan de spammers o anunciantes. Pero, esta prohibición es aplicada a contenido «ideológicamente indeseable».

Incordio de redes sociales.
Hasta ahora, los informes no proporcionaron ninguna evidencia directa de manipulación de lo que encontramos en las redes sociales.

Las redes sociales mostraron a quien sirven y cuáles son sus valores

Muchos dudan de la efectividad de las prohibiciones. Pero el problema parece tener un impacto significativo en este entorno agresivo con la información. Donde estar en la cima del ciclo de noticias se hace escaso.

Los posibles algoritmos sesgados o las prohibiciones en la sombra parecen ser insidiosos, ya que cambian toda la idea de percibir la información.

Esta manipulación en las fuentes de noticias, puede construir opiniones que pueden basarse en evaluaciones defectuosas, con la escala de apoyo u oposición y varios otros sentimientos sociales.

La controversia en redes sociales, se reavivó después de que la jefa de innovación de Google, Jen Gennay, habló sobre los planes de la corporación para adaptar sus algoritmos. Con el fin de evitar que el presidente Donald Trump ganara las elecciones presidenciales en 2020.

Twitter explicó que la política de moderación de la compañía establece que tratan de reducir el rango de las cuentas que son abusivas.

Mark Zuckerberg señaló, que la plataforma sería capaz de manejar la desinformación. «Evitamos que se propague, en general. Ese es un tema mucho más delicado».

La decisión de Facebook de permitir a sus usuarios difundir el odio y los llamados a la violencia contra el ejército ruso, cambió las reglas del juego.

Estas posibles manipulaciones generan preocupación en medio de la creciente incertidumbre sobre la imparcialidad política de las principales plataformas de redes sociales.

Como muchos grupos políticos y de defensa no extremistas en todo el mundo acusaron a Twitter y Facebook de favorecer creencias políticas y sociales.

La capacidad de las plataformas para asegurar un entorno seguro y abierto para la discusión, se puso en serias dudas y se dejó ver las costuras de la doble barra de medir de los medios.

Fuente
ElConfidencialBBCVozdeAmerica

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