España ha negado otra extradición del caso PDVSA

Esta vez se trata del ex viceministro venezolano de Energía, Javier Alvarado Ochoa

La fiscalía española habría dictaminado anteriormente entregar al ex viceministro venezolano de Energía, Javier Alvarado Ochoa a los Estados Unidos, pero los jueces ahora han señalado que sus presuntos delitos también pueden afectar a España, y agregaron que es ciudadano español, el ex viceministro, no será extraditado a Estados Unidos, dictaminó el martes el tribunal nacional de España, lo que lo anexa a otro gran número de implicados al caso PDVSA, que se salvan de la extradición.

Estados Unidos acusó al funcionario de organizar un grupo criminal, de lavado de dinero y soborno, exigiendo que sea extraditado, junto con otros cuyas solicitudes han sido denegadas, sin embargo, Madrid afirmó que el poder judicial español también está investigando a Alvarado Ochoa por cargos similares.

El veredicto de la corte se produce después de que otro ex funcionario venezolano, el mayor general Hugo Carvajal, un ex jefe de inteligencia militar, huyó de la policía española evitando la extradición a norteamérica, por cargos de tráfico de drogas.

El ex viceministro fue arrestado por las autoridades españolas en mayo, ya que las acusaciones norteamericanas afirmaban que intentó legalizar el dinero que obtuvo de los sobornos como director de una subsidiaria de la compañía petrolera venezolana PDVSA.

El caso de Ochoa se convierte en otro de los muchos casos inconclusos, que, por medidas burocráticas, se ha engavetado en el país peninsular, pues cada vez es más patente una gran cantidad de intereses ocultos de varios funcionarios de gobiernos extranjeros sobre lo birlado a PDVSA.

La extradición frustrada de delincuentes no ha excluido en PDVSA

Muchos de ellos han pasado al olvido, como en el caso de Rafael Ramírez, que se encuentra prófugo de la justicia venezolana e incluso de norteamérica, pero hace repetidas apariciones en medios internacionales, para señalar otros escándalos en PDVSA, para distraer del suyo propio.

Muchos medios se han tomado la tarea de hacer la misma práctica, creando matrices de opinión contra algunos ex trabajadores de la estatal, para entretener a quienes no quieren oír, tal es el caso de la campaña que, durante muchos años, mantuvieron algunos medios de Miami, contra Eudomario Carruyo y su hijo, por sus supuestas implicaciones en el escándalo de PDVSA y que, a pesar del afán colocado, no pudieron comprobar.

Otros se han enfocado en perseguir a los llamados boliburgueses, ocultando sus propios negocios de lavado y sus conexiones con el gobierno bolivariano, dirigiendo las miradas en otra dirección, como se pudo observar en la campaña orquestada contra Raúl Gorrín.

Después de que estalló la crisis política en Venezuela a fines de enero, la casa blanca, impuso varias rondas de sanciones contra funcionarios y entidades venezolanas y bloqueó unos 7 mil millones de dólares en activos pertenecientes a PDVSA y sus subsidiarias.