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Arica, la historia en contra la contaminación minera

Historia de la gente de Arica, luchando contra un gigante minero

Desgarrador y exhaustivo, el documental de Lars Edman y William Johansson arroja luz sobre la lucha por la justicia ambiental en un mundo globalizado. Durante la década de 1980, la corporación minera sueca Bolliden transportó 20 mil toneladas de lodos de fundición contaminados con plomo y arsénico a Arica en Chile.

Sin apenas esfuerzos para reciclar y aislar la enorme cantidad de desechos, el polvo tóxico sopló en las casas residenciales y los niños jugaron en el vertedero. Generaciones de chilenos de Arica, terminaron con enfermedades relacionadas con el arsénico, incluyendo varias formas de cáncer y defectos de nacimiento.

Esta es una continuación de Toxic Playground, el primer documental de Edman y Johansson sobre el tema. Esta fascinante segunda película narra el primer caso judicial entre Boliden y los ciudadanos de la ciudad de Arica en 2018.

Durante el juicio, casi 800 chilenos hicieron un reclamo de negligencia contra el gigante minero. El caso, puso al descubierto las desigualdades entre el sur global y los países desarrollados.

Conoce a Arica y su historia.
La mala fama de Boliden viene de lejos. Desde el desastre ecológico en el parque de Doñana, que contaminó el río Guadiamar en 1998 y trastornó a la sociedad española.

Una historia de investigación impactante sobre los vertidos tóxicos en Arica

La compañía argumentó que la autoridad sanitaria chilena y una empresa local compró el lodo a Boliden. Haciendo a estas responsables de cualquier problema de salud causado a los habitantes de Arica.

Con su equipo de expertos, uno de los cuales sugirió que el alto nivel de arsénico encontrado en los residentes era debido al consumo de mariscos. Boliden hizo todo lo posible en su intento de aplastar la demanda.

Incluso, la cantidad que la empresa gastó en honorarios legales casi igualó la compensación financiera solicitada por los ciudadanos de la ciudad envenenada.

En contraste con las tácticas utilizadas en la acción legal, el parentesco entre los residentes de Arica y los cineastas es especialmente conmovedor.

En el transcurso de la lucha de su ciudad natal por la justicia, Jocelyn, una niña se convirtió en una mujer con un hijo que lleva el nombre de los cineastas.

Presenciar esta evolución en pantalla es asombroso. A pesar de los obstáculos legales y mirar a los residentes de Arica perseverar valientemente a través del dolor y la pérdida con una solidaridad digna, es reconfortante y conmovedor.

Fuente
ElMostradorDocsBarcelonaCineEuropa

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