El outsider Nayib Bukele, se hace con la presidencia
Los salvadoreños han elegido a Nayib Bukele, el ex alcalde de la capital San Salvador, como su próximo presidente este domingo, entregando una fuerte reprimenda a los dos partidos que surgieron de la brutal guerra civil de El Salvador en la década de 1980 y se habían mantenido el poder desde entonces.
La dramática victoria de Bukele, de 37 años, que era considerado como un forastero, pone de relieve el profundo descrédito en que han caído los partidos tradicionales del país, los votantes parecen dispuestos a apostar a un relativamente recién llegado para enfrentar la pobreza y la violencia, en un país blanqueando por partidos de izquierda y derecha que han dominado la política salvadoreña durante tres décadas.
El Bukele obtuvo casi el 54% de los votos en los resultados preliminares, refirió la junta electoral, superando a Carlos Calleja, un ejecutivo de supermercado que era el candidato conservador del partido Arena.
Hugo Martínez, ex ministro de exteriores que militó para el gobernante frente Farabundo Martí de liberación nacional, o FMLN, vio a muchos de los votantes de su partido migrar con Bukele y tan sólo llegó en un distante tercero.
«Hoy nos hemos dado vuelta a la página del período de posguerra,» comento Bukele, en du discurso de victoria, los ataques de la izquierda y la derecha parecen tener poco efecto en la popularidad de Bukele, que fue impulsada por una campaña de medios sociales.
El reformador, está dispuesto a liderar sobre el establecimiento político osificado, la conservadora alianza republicana nacionalista, conocido como Arena, fue fundada en 1981 por el líder de extrema derecha Roberto D’Aubuisson, quien fue acusado de organizar escuadrones de la muerte durante la guerra civil.
El FMLN es la parte de la guerrilla izquierdista que depuso sus armas después de acuerdos de paz fueron firmados en 1992 y ganó la presidencia en 2009, aunque las tasas de pobreza han caído un poco durante la última década, dos sucesivos gobiernos del FMLN han luchado para hacer frente a la creciente violencia de pandillas callejeras.
Bukele ha sostenido la promesa de cambio después de 30 años, comentó Roberto Cañas, politólogo universidad José Simeón Cañas, «no es su programa, ni sus discursos… Es porque están cansados, enojados, hartos de la corrupción, hartos de promesas incumplidas, y ven en él, todo lo que él no representa».
Bukele cambia el liderazgo hacia un camino nuevo
Muchos analistas afirmaron que las propuestas de los tres principales candidatos difieren poco, pero que Nayib fue capaz de colgarse del tema de la corrupción, que ha agitado la política en América latina y ha allanó el camino para más candidatos que prometen combatirla y en El Salvador, ambos partidos tradicionales son blancos fáciles.
El ex presidente Tony Saca, un político de Arena, cumple una condena de 10 años de prisión después de que él se declaró culpable el año pasado de cargos de malversación y lavado de dinero en el desvío de más de 300 millones de dólares en fondos públicos.
Mauricio Funes, un ex locutor de televisión que fue primer presidente del FMLN, está acusado de malversación de 351 millones de dólares, en el 2016, huyó a Nicaragua, que le ha concedido refugio, aunque «en la imaginación popular, es de la izquierda decente, aunque no fue un buen administrador,» afirma Salvador Samayoa, un ex líder FMLN que ahora es un consultor independiente.
Bukele hizo ataques a la corrupción una pieza central de su campaña, corriendo en los lemas: «Nos dan vuelta lo que robaron» y «Hay suficiente dinero cuando nadie la roba» y ha propuesto que El Salvador adoptar una versión de la comisión internacional contra la corrupción que ha estado activa en la vecina Guatemala por más de una década, aunque ha ofrecido pocos detalles.
En condición de intruso Bukele es relativamente nuevo, fue alcalde de San Salvador por el FMLN hasta que fue expulsado del partido en el 2017, por sus críticas abiertamente contra él, buscando un vehículo para su campaña, unió fuerzas con un pequeño partido de extrema derecha, la gran alianza por la unidad nacional, conocido como Gana.
Él ha ido cuidadosamente cultivando su presencia en las redes sociales desde el comienzo de su carrera política hace seis años, comentó Amparo Marroquín, profesor de comunicación y cultura en la universidad Centroamericana, los videos en la página de Facebook de Bukele alternan entre clips envasados ante multitudes y torpes apelaciones desde su sala de estar, donde él se sienta en un sofá blanco frente a una pintura abstracta gigante.
Pasó poco tiempo viajando por el país, no dio oportunidad de debates con candidatos y evitó entrevistas con periodistas que podrían desafiarlo, o críticos que pudieran sugerir que era intolerante, “hay una percepción de una persona arrogante, autoritaria, que no se expone al diálogo» comentó Álvaro Artiga, profesor de ciencias políticas en la universidad Centroamericana.
