Se presentó un proyecto de ley para hacer optativo la donación de plasma sanguíneo de sobrevivientes del Covid-19
Un legislador de la provincia de Buenos Aires, Argentina, presentó un proyecto de ley el lunes que requeriría que los argentinos optaran por donar plasma sanguíneo si se les diagnostica Covid-19 y sobreviven a la infección. Esta propuesta revierte los comentarios, sobre la donación obligatoria oficial, que levantó indignación.
Los detalles de la ley, introducidos por el diputado estatal Daniel Lipovetzky, parecen ser menos graves que su propuesta inicial en Twitter, donde anunció este fin de semana que presentaría una ley para hacer que las donaciones de plasma sean «obligatorias», lo que provocó una ola de indignación de los usuarios que temían que el estado usurparía su autonomía corporal.
Mientras, científicos de todo el mundo están experimentando con el uso de plasma sanguíneo para ayudar a los pacientes con Covid-19 recuperados. En las personas que han soportado y sobrevivido a una infección, el plasma transporta anticuerpos clave creados en respuesta al virus, anticuerpos que ya han derrotado al virus al menos una vez.
La terapia con plasma o plasmática supone que introducir los anticuerpos que una persona creó en la sangre a otro paciente que está luchando actualmente contra el virus puede ayudarle a recuperarse. Esta práctica ha sido funcional contra otras patologías, pero todavía no se considera una cura garantizada.
Lipovetsky publicó en Twitter el sábado que había preparado un proyecto de ley para la donación de plasma «obligatorio» en respuesta al periodista argentino Fernando Bercovich reflexionando en voz alta, «¿es malo pensar que esa donación de plasma de las personas que se recuperan debe ser obligatoria?»
La donación de plasma no será obligatoria, si el paciente recuperado, no está de acuerdo
“No está nada mal”, Fernando, afirmó Lipovetsky. «Este lunes presentaré un proyecto de ley en la cámara de diputados provincial, que acabo de terminar de redactar, estableciendo que, durante la emergencia, halla carácter obligatorio de al menos una donación de plasma de personas que se han recuperado mayores de 18 años y menores de 60 años».
Según el punto de vista argentino, Lipovetzky añadió más tarde que las donaciones de plasma obligatorias «son un compromiso moral para superar el diez por ciento de donaciones como tenemos actualmente en la provincia de Buenos Aires».
La declaración desencadenó alarma y confusión en Twitter, particularmente desde la derecha argentina. Libertario Javier Milei respondió a la noticia del proyecto de ley informando que una donación obligatoria «NO ES UNA DONACIÓN». Un seguidor respondió: «¡En Argentina, quieren expropiar la sangre! No queda nada que saquear y ahora quieren nuestra sangre, que locura».
El proyecto de ley que Lipovetzky presentó a la legislatura estatal no incluyó ninguna disposición para ordenar donaciones de sangre o plasma, tal vez una respuesta a la indignación que causaron los comentarios iniciales del legislador. En cambio, su ley reflejaría las disposiciones vigentes sobre la donación de órganos: si un paciente no opta por no recibir la donación de plasma, será catalogado como donante si se enferma y se recupera del Covid-19.
