El gigante automotriz esta lastimada por la epidemia de Covid-19
Ford Motor Co afirmó que las nuevas restricciones de personal impuestas a las plantas que producen piezas de automóviles en el estado mexicano de Chihuahua «no son sostenibles», la última señal de que los fabricantes de automóviles con sede en Estados Unidos todavía se tambalean por los bloqueos de coronavirus en México.
México es una parte clave de una cadena de suministro internacional más amplia crucial para los fabricantes de automóviles estadounidenses, no sólo para Ford. Muchos fabricantes operan fábricas al otro lado de la frontera de México debido a los menores costos de mano de obra.
Chihuahua, donde el gobierno del estado ha limitado la asistencia de empleados al 50% en las plantas, es el hogar de una las mayores plantas de motores para Ford y muchos productores de piezas de automóviles.
El embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, indicó que el fabricante de automóviles con sede en Dearborn, Michigan, podría tener que cerrar algunas plantas de vehículos Ford, tan pronto como la próxima semana si no reciben los motores producidos en México.
La planta de Ford en el estado de Chihuahua en México, ha restringido la asistencia de empleados al 50%
Kumar Galhotra, presidente de Ford Américas and International Markets Group, indicó que la compañía tenía «varios proveedores», que actualmente están operando bajo restricciones impuestas por el estado de Chihuahua. «Con nuestras plantas estadounidenses funcionando al 100%, eso no es sostenible», señaló Galhotra en un comunicado por correo electrónico.
«Aunque no esperamos ningún impacto en la producción la próxima semana, seguimos trabajando con funcionarios gubernamentales sobre formas de reanudar de forma segura y constructiva la producción restante de la planta mexicana de motores y partes de Ford».
El gobierno federal de México ha otorgado a los fabricantes de automóviles, las empresas mineras y los constructores, la denominación de actividades consideradas esenciales, la luz verde necesaria para reiniciar el trabajo, aunque algunos estados han implementado sus propias restricciones a medida que avanza la pandemia del coronavirus.
Landau expresó que un alto ejecutivo de Ford le contó sobre la preocupación de la compañía por las piezas producidas en el estado de Chihuahua. «Están diciendo que van a empezar a cerrar fábricas en los Estados Unidos a partir de la próxima semana si no consiguen que esto funcione», señaló Landau, en una charla organizada por el consejo Atlántico.
Alejandra de la Vega, ministra de innovación y desarrollo económico de Chihuahua, explicó que estaba en «contacto constante» con Ford y habló con un ejecutivo de la compañía, pero no especificó lo que se discutió.
