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Mineros matan indígenas en el Amazonas

Un secreto a voces que se ha evidenciado con Bolsonaro

Un grupo de mineros de oro o Garimpeiros, fuertemente armados han invadido una remota reserva indígena en el norte de Brasil y para cumplir ese cometido, han apuñalado a muerte a uno de sus Caciques, forzando a desplazase a los nativos y aunque la noticia pareciese aterradora y chocante, esta práctica se ha instaurado en el Amazonas y se ha desbordado desde la llegada de Jair Bolsonaro.

Los residentes de la aldea en el estado de Amapá huyeron por el miedo a los mineros y hubo preocupaciones de que estallaran violentos enfrentamientos si intentaban recuperar su tierra rica en oro, pero para evitar que pudiesen volver, la policía ha llegado a la zona.

Las tensiones en la región amazónica están aumentando a medida que el presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro, que está en contra de las reservas, promete abrir algunas de ellas a los mineros, Bolsonaro afirma que los territorios indígenas son demasiado grandes dada la cantidad de personas que viven allí, y los críticos lo acusan de alentar la minería ilegal y las invasiones de reservas.

El grupo de 10 a 15 mineros fuertemente armados invadió la aldea Yvytotõ de la comunidad Wajãpi y «las tensiones eran altas», según la agencia de derechos indígenas de Brasil, Funai, los residentes huyeron a la aldea Mariry, a unos 40 minutos a pie, y se les advirtió que no intenten entrar en contacto con los invasores.

Según las cuentas de Wajãpi, Funai indicó que los mineros habían matado el miércoles a Emyra Wajãpi, de 68 años, cuyo cuerpo fue encontrado con marcas de arma blanca en un río cerca de Mariry, sin embargo, denunciaba que no había estado en la escena del crimen debido a la dificultad de acceso.

Y a pesar de las crecientes tensiones, los asesinatos de líderes indígenas en Brasil no son raros, el incidente parece confirmar los peores temores sobre el destino de los territorios indígenas protegidos de Brasil.

Mineros Garimpeiros.
Unos 50 mineros han invadido tierras indígenas de la aldea de Wajãpi en Pedra Branca do Amapari, a 200 km de Macapá, y el clima en la región se enfrenta a amenazas de derramamiento de sangre.

“Los están armados con ametralladoras y estamos en peligro, necesitamos que el ejército y la policía federal, si no hay apoyo, actuaremos pronto”

Los indígenas han regresado al área forestal y prometen recuperar la aldea en un conflicto sin precedentes si las fuerzas de seguridad no intervienen, el concejal Jawaruwa Waiãpi apeló al senador Randolfe Rodrigues para pedirle al ejército y la policía federal, que intervengan en el caso.

La policía federal y una fuerza de élite llegaron al área el domingo, 4 días después de reportado el incidente, a pesar de encontrarse a tan sólo tres horas de distancia, y tanto la policía federal como la fiscalía federal explicaron que investigarán los hechos, informados por un líder local.

«Esta es la primera invasión violenta en 30 años desde la demarcación de las reservas indígenas en Amapá», señaló el senador Rodolfe Rodrigues al periódico local Diario do Amapá, advirtiendo sobre un «baño de sangre».

Los 1 mil 200 miembros de la comunidad de Wajãpi viven en docenas de aldeas en una reserva de 600 mil hectáreas en Amapá, al lado de la Guayana Francesa; el pasado sábado, Bolsonaro expresó que algunos de los territorios indígenas estaban en «tierras muy ricas en minerales» y que estaba «buscando al primer mundo para explorar estas áreas en asociación y agregar valor», según el periódico O Globo.

«Esa es la razón de mi decisión de acercarme a los Estados Unidos, por eso quiero a una persona de confianza en la embajada en los Estados Unidos», comentó Bolsonaro, que quiere nombrar a su propio hijo, el congresista, Eduardo, como embajador, aunque no ha comentado sobre los eventos en Amapá.

Bolsonaro, quien asumió el cargo en enero, prometió integrar a los pueblos indígenas al resto de la población y cuestionó la existencia de sus territorios protegidos, que son derechos garantizados en la constitución del país.

El presidente también criticó a la agencia de protección ambiental, Ibama, y ​​acusó al instituto espacial nacional, Inpe, de mentir sobre la magnitud de la deforestación en el Amazonas, los activistas señalan que la relajación de las protecciones podría conducir a una mayor deforestación de la selva amazónica y amenazar la existencia de pueblos indígenas.

Fuente
DiarioDoAmapa

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