Aunque hubo una victoria mexicana, la amenaza de Trump no ha terminado
Luego de iniciada la retórica de Donald Trump contra la política migratoria de México, el mismo presidente norteamericano, tuvo que dar marcha atrás por presiones internas, pero en un movimiento inesperado hoy le ha dado a México 45 días para reducir la cantidad de migrantes que cruzan su territorio en su camino hacia los Estados Unidos.
El ministro de relaciones exteriores de méxico, Marcelo Ebrard, dio el lunes detalles de un acuerdo alcanzado con Estados Unidos para evitar la imposición de aranceles a los productos mexicanos, pero a pesar de que no se ha establecido un objetivo específico, las medidas tomadas por México para frenar el flujo de migrantes se evaluarán a mediados de julio, comentó Ebrard.
Si el número no hubiera bajado para entonces, se buscaría una solución regional, Ebrard informó que el acuerdo alcanzado el viernes después de días de «la negociación más difícil» le dio a México la oportunidad de demostrar que podría tener éxito en reducir la cantidad de migrantes.
Arguyendo que los negociadores estadounidenses habían querido que México se comprometiera en un programa de «cero migrantes» que cruzaran su territorio, pero según Ebrard, eso era una «misión imposible».
El ministro Ebrard explicó que la parte estadounidense también quería designar a México como un «tercer país seguro», lo que habría requerido que México aceptara a los solicitantes de asilo que se dirigían a los Estados Unidos y procesaban sus solicitudes en su propio territorio.
El canciller azteca expuso que, por el momento, había evitado la medida: «Les dijimos que creemos que fue el logro más importante de las negociaciones», establezcamos un período de tiempo para ver si lo que México propone funcionará y si no, nos sentaremos y veremos qué medidas adicionales son necesarias».
Autoridades de México informaron que desplegaría su Guardia Nacional en todo el país a partir del lunes, con 6 mil soldados adicionales enviados a su frontera sur con Guatemala.
Donald Trump mantiene una posición beligerante contra AMLO y México
Los cruces fronterizos ilegales en la frontera norte de México con norteamérica han vuelto a aumentar después de alcanzar el nivel más bajo en el primer año en el cargo del presidente Trump.
En febrero, Trump declaró una emergencia en la frontera de Estados Unidos con México, diciendo que era necesario para enfrentar lo que describió como una crisis.
En mayo, Trump amenazó con que los aranceles del 5% sobre los productos mexicanos se impondría el 10 de junio y aumentaran un 5% cada mes hasta alcanzar el 25% en octubre si México no tomaba medidas sustanciales para frenar la migración.
México es actualmente uno de los socios comerciales más grandes para los Estados Unidos, justo detrás de China y Canadá, después de días de negociaciones, el viernes se llegó a un acuerdo que ambas partes consideraron un éxito.
Pero el lunes, el presidente Trump advirtió que las tarifas no estaban completamente fuera de la mesa, y que, si la parte del acuerdo que requería la aprobación del congreso de México no se aprobaba, las tarifas se restablecerían.
Cuando se le preguntó sobre el tweet, Ebrard explicó que pensaba que el presidente Trump se estaba refiriendo a las posibles medidas regionales que se tomarían junto con las naciones centroamericanas de donde provienen la mayoría de los migrantes.
Ebrard indicó que, esas medidas solo se tomarían si fracasaban las acciones planeadas por el gobierno mexicano, como reforzar su frontera con Guatemala, «Si estas medidas no funcionan, tendríamos que pasar a un modelo regional para ser aprobado por el congreso mexicano, a eso se refiere».
