Venezuela logró permiso total para apelar sentencia del Reino Unido que niega el acceso a sus reservas en oro
El banco central venezolano, BCV, ha recibido el derecho de apelar todos los aspectos de un fallo original de un tribunal británico que negó la custodia de Caracas de las reservas de oro venezolanas que actualmente están en manos del Banco de Inglaterra, comentó un abogado el lunes.
Según una orden judicial emitida el 3 de agosto, Gary Hickinbottom dictaminó que el BCV podría apelar por los nueve motivos suministrados, añadiendo que la apelación sería escuchada en septiembre.
«Nos complace que el tribunal de apelación revisó todos los aspectos de esta sentencia. Los temas en juego siguen la línea sensible entre la ley y la política, y es vital que se resuelvan», expresó Sarosh Zaiwalla, socio senior de Zaiwalla & Co, el bufete de abogados que representa al BCV, en una declaración escrita.
El 2 de julio, el tribunal superior del Reino Unido falló en contra del BCV, que ha llevado al banco de Inglaterra a juicio por negarse a devolver 31 toneladas de oro depositadas en sus bóvedas con el argumento de que el autoproclamado presidente Juan Guaidó había presentado una reclamación rival sobre el oro, que se valora en un estimado de 1 mil 200 millones de dólares.
A Venezuela le urge apelar la sentencia, para poder acceder a recursos necesarios
Después de declarar que Guaidó fue «inequívocamente» reconocido por el Reino Unido como presidente de Venezuela, tras una declaración hecha por el entonces secretario de relaciones exteriores Jeremy Hunt en 2019, el juez Nigel Teare había concedido al BCV un permiso limitado para apelar su sentencia por un solo motivo.
Según el bufete de abogados con sede en Londres, el poder prerrogativo del gobierno del Reino Unido de reconocer a un gobierno extranjero no puede utilizarse para intervenir coercitivamente en los asuntos internos de un país extranjero, en violación de las normas legales internacionales.
«Tal como está, una simple declaración de reconocimiento del gobierno del Reino Unido es suficiente para alejar los activos del control de un gobierno en un control efectivo, sin ningún descuido, lo que decimos no puede ser correcto. Si el Gobierno del Reino Unido va a utilizar el reconocimiento como arma para perseguir sus objetivos de política exterior, debe hacerlo dentro de los límites legalmente permitidos de ese poder, y sujeto a la supervisión de los tribunales», añadió el bufete.
