La tierra, 5 años con los récords más calientes
La tendencia de 1,5°C de aumento anual, se ha mantenido desde 2014
Según los nuevos informes publicados el miércoles, los últimos cinco años, de 2014 a 2018, son los años más calientes registrados en los 139 años en que la administración nacional oceánica y atmosférica, NOAA, ha rastreado el calor global, pero 2019 amenaza con ser el quinto año más caluroso jamás registrado.
Las temperaturas globales del aire se han estado calentando calentado de manera constante durante las últimas décadas, subiendo y bajando ligeramente de un año a otro, dependiendo de las oscilaciones naturales del clima como el Niño, pero siguiendo una trayectorias ascendentemente calientes y constantes.
Las temperaturas de la tierra, se han escalado anualmente casi dos grados centígrados hacia arriba en medio siglo, este «es un viaje a largo plazo por el elevador del calentamiento», indica Deke Arndt, el jefe de la rama de monitoreo global de los centros nacionales de información ambiental de NOAA y desde el pasado viernes 21 de junio ha comenzado oficialmente el verano y las agencias de meteorología alertan de que los termómetros alcanzarán valores muy altos durante toda la semana en lo que seguramente se convertirá en la primera ola de calor del periodo estival.
Aunque el aumento de las temperaturas en verano no sorprende a nadie, científicos de todo el mundo denuncian cómo la Tierra es cada vez es más cálida y los periodos estivales se extienden por más días y son más calientes.
«El mensaje clave es que el planeta se está calentando», explicó Gavin Schmidt, director del instituto Goddard de estudios espaciales de la NASA en la ciudad de Nueva York, en una conferencia de prensa, «y nuestra comprensión de por qué están ocurriendo esas tendencias también es muy sólida. Es debido a los gases de efecto invernadero que hemos puesto en la atmósfera durante los últimos 100 años».
Siendo el pasado el más caluroso año de los años más calientes, este año a mediados de mes habrá superado el récord
La tendencia no es nueva, ya que llevamos nueve de los 10 inviernos más calientes y esto ha ocurrido desde 2005, y los últimos cinco de los años más cálidos registrados, han ocurrido en los últimos cinco años, desde 2014 a 2018.
Además, la NASA y la NOAA verificaron dos veces su trabajo en comparación con los hallazgos de otros grupos, incluida la oficina Met del Reino Unido y la organización meteorológica mundial, MWO, que también ubicaron al 2018 como el quinto año de los más calientes registrados.
Hubo un calor récord de temperatura en tierra y el océano, en gran parte de Europa, el Mediterráneo, Medio Oriente, Nueva Zelanda y Rusia, así como en partes del océano Atlántico y el Pacífico occidental, Deke Arndt, jefe de la sección de monitoreo en NOAA, afirmó que los centros nacionales de información ambiental secundaron la tendencia alcista.
Pero no estaba chisporroteando por todas partes, «la parte interior del norte de América del Norte estaba en el lado frío de la historia reciente, particularmente en las provincias de las praderas de Canadá», expuso Arndt, eso explica, en parte, por qué 2018 estuvo solo entre los 20 años más cálidos de Norteamérica.
Estas instituciones, no solo han medido cómo han cambiado las temperaturas en un año, sino que han prestado atención a su evolución en el último periodo, de este modo, han comprobado que, si bien desde 1880 la temperatura anual promedio ya se incrementaba en 0,07°C, desde 1981 se ha más que duplicado, al aumentar 0,17°C cada diez años.
Las medidas ya puestas en marcha en muchos de los países firmantes del acuerdo de París, deberían reforzarse, igual que aquellos que se han quedado rezagados tendrían que comenzar a apurar el cambio, aunque ya no hay margen, es necesario trabajar a la carrera en ello, pues las cifras acordadas en París podrían fulminarse este año y la agonía del planeta se convertiría en una realidad cada vez más difícil de paliar.
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