La telefónica AT&T compra a Time Warner

Dos años después de haber estado en los tribunales, la interminable novela de Time Warner y AT&T tuvo un final feliz, al menos para AT&T, cuando el juez de la corte federal del Distrito de Columbia, Richard León, falló a favor del coloso de las comunicaciones, para permitir la adquisición al otro monstruo de los medios por 85 mil 400 millones de dólares, Time Warner se ha especializado en la distribución de contenidos en línea, por los que entrará en la escena del streaming debilitando a sus competidores, a pesar de los incontables intentos del gobierno norteamericano de frenar la fusión, por un aparente detrimento del sector.

Makan Delrahim, vicefiscal federal de los Estados Unidos, ha manifestado el lamentable desenlace de esta novela, “Seguimos creyendo que el mercado de la televisión paga será menos competitivo y menos innovador como resultado de la fusión propuesta entre AT&T y Time Warner. Analizaremos en profundidad la opinión judicial y consideraremos los pasos a seguir a la luz de nuestro compromiso de preservar la competencia en beneficio de los consumidores nacionales”, afirmó el funcionario ante el fallo de León.

AT&T tomará control de inmediato de grandes cadenas como CNN, HBO y Warner Bros, aunque exista una prorrogada apelación, la compra tiene especial jerarquía porque en este caso hablamos de la empresa de telecomunicaciones más extendida en el mundo y la más grande en prácticas monopólicas, y estaría absorbiendo a la tercera compañía de entretenimiento que existe.

«Un arma para obstaculizar la competencia».

Makan, ha señalado en un comunicado «Revisaremos de cerca la opinión del tribunal y consideraremos los próximos pasos a la luz de nuestro compromiso con la preservación de la competitividad en beneficio de los consumidores estadounidenses», expresó.

La administración de la Casa Blanca de Donald Trump había establecido una demanda para bloquear la fusión, arguyendo que lesionaría la competitividad de la televisión tarifada e implicaría un posible aumento en los importes que afectaría en cientos de millones de dólares a millones de consumidores de televisión por streaming, sólo en la federación norteamericana.

La combinación de estos dos gigantes representa un verdadero “desastre” para los actuales amos del mercado del streaming y que se encuentran en una batalla despiadada para hacerse del contenido que fabrica Hollywood, hablamos de Netflix y Amazon, que, preparándose para tiempos peores, han invertido indemnes cantidades de dinero cantidades de dinero, para poder crear contenido propio de alto impacto, que compita con el generado desde California para no depender de los viejos estudios.

A la jugada ya se habrían unido otros como Disney, que se preparan a lanzar sus propias plataformas de servicios de entretenimiento en línea, por lo que la competencia se volcará definitivamente a obtener la suscripción del consumidor y que sólo se beneficiara con las ofertas generadas por las cadenas existentes y las nuevas que llegan, pero ahora la llegada del titán pone el camino más cuesta arriba.

Anunciada a finales de 2016, la fusión valorada en 85.400 millones de dólares tendría como fin unificar los negocios inalámbricos, de banda ancha y servicios de televisión por satélite con el entretenimiento propiedad de Time Warner, incluyendo TNT, CBB, HBO o Warner Bros, el fallo del juez será visto por otros gigantes tecnológicos y de telecomunicaciones como una puerta abierta para proseguir con las adquisiciones de medios.