La primera gran sanción bajo el DSA
La Comisión Europea ha impuesto a X (antes Twitter) una multa de 120 millones de euros, la primera bajo el Reglamento de Servicios Digitales (DSA). Según Bruselas, la red social de Elon Musk incumplió sus obligaciones de transparencia en tres áreas clave: el repositorio de anuncios, el acceso a datos para investigadores y el diseño de su servicio de pago, el conocido blue check.
El engaño del distintivo azul.
Los técnicos de la Comisión consideran que la marca azul puede inducir a error, haciendo creer a los usuarios que una cuenta está verificada cuando en realidad solo ha pagado por el distintivo. Por ello se impuso una sanción de 45 millones. A esto se suman 35 millones por la falta de transparencia en publicidad y 40 millones por las trabas al acceso de investigadores.
Impacto económico y político.
Aunque menor que las multas multimillonarias a Google o Apple, la sanción representa cerca del 5% de los ingresos globales de X en 2024, lo que la convierte en un golpe significativo para la compañía. La decisión llega en medio de tensiones con Estados Unidos, que acusa a la UE de usar el DSA como herramienta de censura. “El DSA no tiene nada que ver con la censura, se trata de transparencia”, defendió la vicepresidenta de la Comisión, Henna Virkkunen.
Choques con Musk y reacción de Washington.
Elon Musk ha mantenido enfrentamientos verbales con líderes europeos, especialmente tras su apoyo a la ultraderecha en Alemania. La multa marca el primer paso concreto de Bruselas contra el magnate. La reacción en EE. UU. fue inmediata: el secretario de Estado Marco Rubio calificó la sanción como “un ataque a las plataformas tecnológicas estadounidenses”.
TikTok evita la sanción.
En contraste, TikTok logró un acuerdo con la Comisión al presentar compromisos vinculantes sobre transparencia publicitaria. La plataforma china ya había retirado un servicio que pagaba a usuarios por ver vídeos, tras advertencias de Bruselas sobre su seguridad.
