Luego de negarse a las negociaciones Guaidó convoca a reunirse en Barbados
La semana pasada, el diputado Juan Guaidó, líder de la oposición y presidente de la asamblea nacional había referido que no había planes para volver a abrir las conversaciones con la “dictadura asesina” de Nicolás Maduro, pero este fin de semana, parece haberlo pensado bien y el presidente interino, informó que las conversaciones se reanudarán en Barbados, aunque no había planes claros para las conversaciones.
El presidente provisional de Venezuela, Juan Guaidó, publicó el domingo en su cuenta de twitter, un comunicado con el que invita a un nuevo diálogo mediado por Noruega entre la oposición y el presidente Nicolás Maduro, que se llevará a cabo en Barbados.
Guaidó, no especificó una fecha para la reanudación de las conversaciones en el nuevo lugar, en el Caribe, después de que las discusiones anteriores se estancaran en Noruega y de que el mismo en su alocución del 5 de julio, habría negado la posibilidad de una nueva ronda de conversaciones.
«En respuesta a la mediación del Reino de Noruega (la oposición) asistirá a una reunión con representantes del régimen usurpador en Barbados, para establecer una negociación sobre el fin de la dictadura», escribió Guaidó en su comunicado.
Las delegaciones que representan a los rivales venezolanos se reunieron cara a cara en Oslo por primera vez a fines de mayo, en un proceso que comenzó dos semanas antes bajo los auspicios de Noruega para encontrar una solución a la crisis económica y política del país sudamericano.
La nación sudamericana rica en petróleo, ha sido devastada por cinco años de recesión marcada por la escasez de alimentos, medicinas y otras necesidades básicas y la plena confrontación entre las dos posturas que pugnan por hacerse del poder.
Las conversaciones entre el gobierno y la oposición han caído en estancamiento
Venezuela, se hundió aún más en la agitación política en enero cuando el presidente de la asamblea nacional, el diputado de voluntad popular, Juan Guaidó, se declaró a sí mismo como presidente interino en un desafío directo a la autoridad de Maduro.
Guaidó, inmediatamente fue reconocido por los Estados Unidos y otros 50 países occidentales, muchos de ellos de la unión europea, pero no ha podido desalojar a Maduro, que está respaldado por Cuba, Rusia y China y no es disidente a otros 150 países a nivel mundial.
El martes pasado, Guaidó había dicho que no había planes para reabrir las conversaciones con la «dictadura asesina» de Maduro, luego de la muerte de un oficial detenido por su participación en el golpe de estado del 30 de abril contra Maduro.
La muerte sospechosa del oficial naval retirado Rafael Acosta Arévalo provocó la inmediata condena internacional y está descrita en el informe que la alta comisionada de los derechos humanos de la ONU, Michelle Bachelet, presentara la pasada semana.
Guaidó comentó en ese momento, sin embargo, que, si se anunciaban nuevas conversaciones para «facilitar el cese de la usurpación» de Maduro, «la comunicaría oficialmente», las conversaciones de Barbados serán la tercera ronda desde mayo.
Guaidó lidera el movimiento que plantea la salida de Maduro de la presidencia que ha ocupado desde 2013, a un gobierno de transición y luego a «elecciones libres con observadores internacionales», apuntaladas por los Estados Unidos.
Maduro ha dicho repetidamente que el diálogo «continuará» con la oposición, «por la paz en Venezuela», durante un desfile celebrado el viernes pasado por la independencia del país, Maduro expresó que esta semana habría «buenas noticias» sobre las conversaciones.
Venezuela sufre de hiperinflación en una crisis económica que ha obligado a millones a huir, las Naciones Unidas estiman que más de siete millones de venezolanos necesitan ayuda humanitaria urgente, pero Maduro ha resistido una campaña de presión liderada por Estados Unidos que incluye sanciones a las exportaciones de petróleo cruciales de Venezuela.
