La advertencia del presidente se produce luego de frustrar un plan de golpe
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, advirtió el miércoles que sería «despiadado» con la oposición si intentara un golpe de estado, después de que su gobierno expresara que había frustrado un plan para asesinarlo, el gobierno de Venezuela desmanteló un supuesto plan militar previsto para el 23 y 24 de junio y que tenía como finalidad dar un golpe de estado.
El evento incluía el asesinato del mandatario Nicolás Maduro y liberar al general retirado Raúl Isaías Baduel, detenido desde 2009, y proclamarlo presidente, informó ayer el ministro de comunicación e información, Jorge Rodríguez.
«Seríamos despiadados en una contraofensiva revolucionaria contra un intento de golpe de estado fascista, ¡despiadados!» comentó un agitado Maduro en una dirección transmitida en todo el país por radio y televisión, anteriormente.
El portavoz de Maduro, Jorge Rodríguez, indicaba en la televisión estatal que una red de oficiales de policía y soldados en su mayoría retirados planeaban bombardear un edificio gubernamental clave, incautar una base aérea de Caracas y saquear el banco central de Venezuela.
Durante el 16 aniversario del movimiento social frente Francisco Miranda, en Caracas, Maduro confirmó que se capturó uno por uno a los implicados en el complot desarticulado gracias a la lealtad de la fuerza armada nacional bolivariana y acusó a su par de Colombia, Iván Duque, y al ex mandatario Álvaro Uribe de ser los responsables de los intentos de asesinato en su contra, lo que Bogotá rechazó horas después.
Rodríguez explicó en conferencia de prensa en el Palacio de Miraflores que el primer teniente Carlos Lozada Saavedra, alias Tío, fue reclutado para asaltar al parque de armas de los batallones Bolívar y Ayala, además de robar 146 fusiles resguardados en el banco central, para después tomar la base militar Francisco de Miranda, en La Carlota.
También explicó que los conspiradores querían sacar al líder opositor Juan Guaidó del panorama político de Venezuela, Guaidó, líder de la asamblea nacional dominada por la oposición, está tratando de sacar a Maduro del poder con el respaldo de más de 50 naciones, desde enero, cuando invocó la constitución para declararse presidente interino, calificando de ilegítima la reelección de Maduro en 2018.
Este sería el tercer golpe frustrado contra Maduro y el segundo intento de asesinato
El ministro mostró un video con la confesión del teniente Lozada en la que éste asegura que el plan de golpe de estado se ejecutaba con el respaldo de militares israelíes y estadunidenses, el plan, expuso Rodríguez, era asesinar a Maduro, a su esposa Cilia Flores y al presidente de la asamblea nacional constituyente, Diosdado Cabello, además, se pretendía secuestrar al comisario Freddy Bernal, al director del Sebin, Gustavo González López, y al ministro de Interior Justicia y Paz, Néstor Reverol.
Precisó que “el grupo denominado Ulises, tenía la responsabilidad de la captura del general en jefe, Gustavo González López, director del Sebin, y prestar seguridad a Lander”, otra agrupación que actuaría en este plan y cuyo nombre usa el jefe de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, quien se proclamó presidente encargado el pasado 30 de abril.
Rodríguez destacó que Lander tenía la función detener a Reverol, tomar la dirección general de contrainteligencia militar y tumbar a Guaidó para que posteriormente Baduel se proclamara jefe del movimiento opositor en Venezuela.
Rodríguez comentó que la supuesta red quería robar un helicóptero para liberar a Raúl Baduel, un ex ministro de defensa que ahora está en la cárcel e instalarlo como presidente, el gobierno ha reclamado varias parcelas a lo largo de los años, generalmente ofreciendo poca o ninguna evidencia para respaldar sus cargos, la oposición sostiene que Maduro usa tales afirmaciones para justificar su represión contra la disidencia.
Guaidó rechazó la última demanda como otro intento del gobierno por distraerse de los problemas reales de Venezuela, aunque Maduro fuera atacado en agosto pasado por dos drones cargados con explosivos, que detonaron cerca del presidente mientras hablaba en una celebración militar al aire libre, atentado del que no resultó herido y que los funcionarios calificaron como un intento de asesinato.
Rodríguez denunció que el presidente colombiano Iván Duque y el presidente chileno Sebastián Piñera respaldaron el intento de golpe de estado, supuestamente frustrado, pero no proporcionó pruebas, Rodríguez mostró lo que expuso, eran escenas de 56 horas de videoconferencias interceptadas con los supuestos conspiradores y elaboraron una estrategia para el ataque planeado para el 23 de junio.
