El presidente argentino Javier Milei envió una carta a los líderes de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica para comunicarles que su país va a renunciar a los BRICS. Y que, no se integrará al bloque de economías emergentes más adelante, en un giro radical de su política exterior.
¿Qué son los BRICS y por qué Argentina quería ingresar?
Los BRICS son un grupo de países que se caracterizan por tener economías emergentes, grandes poblaciones, vastos territorios y recursos naturales, y una creciente influencia política y diplomática en el escenario mundial.
Los BRICS se formaron en 2006, con la participación de Brasil, Rusia, India y China, y se ampliaron en 2010, con la incorporación de Sudáfrica. Los BRICS tienen una agenda de cooperación en diversos ámbitos. Entre ellos: el comercio, la inversión, la ciencia, la tecnología, la educación, la salud, la seguridad y el medio ambiente.
Argentina había expresado su interés en ingresar a los BRICS desde 2013, durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Por lo que, y había recibido el apoyo de Brasil, su principal socio comercial en la región.
El objetivo de Argentina era diversificar sus relaciones económicas, acceder a nuevos mercados y fuentes de financiamiento. Para fortalecer su posición negociadora frente a los organismos internacionales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI).
¿Qué motivó la renuncia de Argentina a los BRICS y cómo la comunicó?
Al renunciar a los BRICS, Argentina señaló un cambio radical en la política exterior del país. Ahora, impulsada por el nuevo presidente Javier Milei, que asumió el cargo el 10 de diciembre de 2023, tras ganar las elecciones con el 51% de los votos.
Milei es un economista liberal, que se opone al intervencionismo estatal, al populismo, al socialismo y al comunismo. Y, que defiende el libre mercado, el individualismo, el capitalismo y el libertarianismo. Milei también es un aliado de Estados Unidos e Israel, y un crítico de China, Rusia e Irán, a los que considera enemigos de la libertad y la democracia.
Milei comunicó su decisión de renunciar a los BRICS mediante una carta enviada a los presidentes del bloque, el 29 de diciembre de 2023. En la carta, Milei expresó que su gobierno no consideraba oportuna la incorporación de Argentina al BRICS.
Tambien señaló, que revisaría algunas decisiones tomadas por la anterior gestión. Entre ellas, la creación de una unidad especializada para la participación activa del país en el bloque. Milei también destacó el compromiso de su gobierno con la intensificación de los lazos bilaterales con cada país. Y con el aumento de los flujos de comercio e inversión.
¿Qué consecuencias tiene que Milei vaya a renunciar a los BRICS para el país y para la región?
La renuncia de Argentina a los BRICS tiene consecuencias tanto para el país como para la región, que se pueden resumir en:
- Una pérdida de oportunidades y beneficios económicos, que se traduce en menor acceso a mercados, inversiones, créditos, tecnologías y cooperación, que podrían haber contribuido al desarrollo, al crecimiento, al empleo y a la reducción de la pobreza en Argentina.
- Una pérdida de influencia y prestigio políticos, que se refleja en menor participación, reconocimiento, liderazgo y proyección en el escenario mundial, que podrían haber favorecido la defensa, la seguridad, la integración y la diplomacia de Argentina.
- Una mayor dependencia y vulnerabilidad, que se manifiesta en mayor exposición a las presiones, las sanciones, las amenazas y los conflictos de las potencias hegemónicas, como Estados Unidos, y de sus aliados regionales, como Brasil, que podrían afectar la soberanía, la autonomía, la estabilidad y la paz de Argentina.
Una decisión polémica y cuestionada
La renuncia a los BRICS por parte de Milei es polémica y cuestionada. Dado a que está basada en una visión ideológica, unilateral y aislacionista. Que ignora los desafíos y las oportunidades del siglo XXI. Lejos de lograr la soberanía económica, Milei ha puesto en riesgo la competitividad, la diversificación, la innovación y la cooperación de Argentina.
El nobel presidente derechista, debería reconsiderar su decisión, y abrirse al diálogo y a la colaboración con los países emergentes. Puesto que representan una fuerza dinámica y transformadora en el mundo actual, y que podrían ser socios estratégicos para Argentina.
