CuriosidadesInternacionalesSucesosTecnologia

Jack el destripador decodificado

El hombre que aterrorizó las calles de Londres ha sido identificado

El notorio y anónimo asesino que aterrorizó a las calles de Londres hace más de un siglo, que la prensa británica denominó Jack el destripador, puede finalmente haber sido identificado por científicos forenses, pruebas genéticas publicadas la semana pasada en el diario de ciencias forenses, para el momento de los hechos se apuntaba a Aaron Kosminski, un peluquero polaco de 23 años de edad y a un policía como sospechosos del caso.

Nadie nunca fue acusado de los asesinatos suscitados en el East End de Londres en 1888, pero el escritor, detective e investigador Russell Edwards, afirma que un chal ensangrentado que compró en una subasta en 2007, ayudó a identificar al asesino como Aaron Kosminski, un inmigrante polaco de 23 años de edad en el momento de los asesinatos y que murió en un asilo en 1899.

En el libro de Edwards sobre el tema, «Nombres de Jack el destripador», que se espera ser lanzado hoy en el Reino Unido, se describe los sucesos y como a través de la utilización de técnicas modernas y científicas de investigación se dio con el esclarecimiento de un caso que se ha convertido en una leyenda de lo inexplicable.

Históricamente no se había culpado a nadie, de los cinco asesinatos que entre el 31 de agosto de y el 9 de noviembre de 1888, fueron atribuidos a un solo asesino conocido como Jack el Destripador.

Jack el Destripador.
«El círculo está ahora completado. Uno de los mayores misterios sin resolver crimen de todos los tiempos ha sido resuelto a través de la ciencia de vanguardia, investigación histórica y una gran determinación y buena fortuna,» añadió.

La ciencia moderna, le colocó cara a la leyenda de Jack el destripador

Los cuerpos mutilados de Mary Ann Nichols, Annie Chapman, Elizabeth Stride, Catherine Eddowes y Mary Jane Kelly se encontraron apuñaladas hasta la muerte y destripadas en un cuarto de milla uno del otro en Whitechapel, Londres.

Con los años, Jack el destripador se convirtió en una figura notoria del crimen e innumerables libros, películas y documentales, y se ha especulado que pudo haber sido responsable de los crímenes brutales.

Edwards de 48 años, natural de Londres, según los informes, se cautivó con los asesinatos y pasó su tiempo libre investigando, el chal que compró en 2007, según informes, fue encontrado cerca del cuerpo de Catherine Eddowes, una de las víctimas.

Después de comprarlo, alistó la ayuda de Jari Louhelainen, experto en biología molecular, quien al parecer fue capaz de extraer ADN del chal, Louhelainen y Edwards afirman que el ADN llevó a identificar al asesino como Kosminski, que había sido nombrado por años como uno de los seis principales sospechosos en los homicidios.

Kosminski fue nombrado como un posible sospechoso, pero esta es la primera vez que las pruebas de ADN, se han efectuado, bajo estricta vigilancia y con el apoyo de la genética, los resultados provienen de un examen forense del chal de seda manchado, que los investigadores dijeron que encontraron junto al cadáver mutilado de Catherine Eddowes.

Jack el Destripador.
A trevés de un objeto olvidado por el asesino junto al cuerpo de Eddowes, fue como reveló su identidad.

Tan sólo un detalle olvidado

Eddowes, fue la cuarta víctima del asesino cuyo cuerpo gravemente mutilado fue encontrado el 30 de septiembre de 1888, su chal estaba manchado con lo que se afirma es sangre y semen, que según los investigadores pudo haber pertenecido al asesino.

Los investigadores utilizaron para la comparación fragmentos del ADN mitocondrial, que se transmite únicamente de la madre, obtenido del chal y cruzándolas con muestras tomadas de los descendientes vivos de Eddowes y Kosminski, informó el investigador.

Pero los críticos afirman que detalles claves en «variantes genéticas específicas», con las que identificaron y compararon muestras de ADN, no fueron incluidos en el documento, también han cuestionado si el chal es evidencia viable, arguyendo que no hay ninguna prueba, de que estuvo en la escena del crimen, y que se podría haber contaminado con los años.

«En la prueba, el primer resultado mostró una paridad del 99.2%, puesto que el ADN tiene dos cadenas complementarias, fuimos y probado otro filamento, que coincidió en un 100% perfecto con Kosminski», afirmó Louhelainen.

Fuente
ElConfidencialRT

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba
Translate »
error: