El secretario norteamericano exige que acabe el gobierno de Maduro
La larga crisis política venezolana comenzó en enero pasado, cuando el legislador opositor Juan Guiado se autoproclamó «presidente interino» del país, un objetivo que no ha podido lograr, pero que mantiene en agenda: el derrocamiento del gobierno venezolano, con la ayuda, apoyo y financiación del gobierno norteamericano y manejada en el exterior por John Bolton, Pompeo y Elliott Abram.
El secretario de estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, reiteró su llamado insistente a la destitución del presidente venezolano, Nicolás Maduro, «El mundo debe continuar apoyando los esfuerzos del pueblo venezolano para restaurar su democracia y poner fin a la tiranía de Maduro, que daña a millones de venezolanos y tiene un impacto en Colombia y, de hecho, en toda la región», afirmó Pompeo, hablando desde Bogotá, luego de reunirse con el presidente colombiano Iván Duque.
Desde hace más de un año, el gobierno de Donald Trump, ha intentado reiterativamente, crear un marco legal, para derrocar al presidente de Venezuela, incluyendo en sus intentos, al gobierno de derecha de Iván Duque de Colombia y al ultraderechista Jair Bolsonaro de Brasil, países que rodean las fronteras venezolanas.
En reiteradas ocasiones ha habido ataques a cuarteles de frontera, de supuestos paramilitares y fuerzas de defensa colombianos y hasta se instrumentó un golpe de estado en una base aérea militar en la ciudad de Caracas, que no llegó a buen término, pero que fue aplaudida por Pompeo, mientras se sucedía.
Guaidó llegó a la capital colombiana el domingo y se reunió con Duque, agradeció al presidente por su «apoyo a la lucha» y planeó reunirse con Pompeo antes de continuar su camino a Davos, Suiza, para el próximo foro económico Mundial. Duque agradeció a Guaidó, indicando que estaba «honrado» por la presencia de la figura de la oposición y subrayó que el político «siempre tendría un amigo en Colombia».
Pompeo y Guaidó se reunieron el lunes después de asistir a una reunión conjunta sobre antiterrorismo junto a funcionarios colombianos, el secretario prometió que Estados Unidos tomaría «más medidas» para apoyar a Guaidó y por mantener su presencia en los sucesos de Venezuela.
Pompeo llegó a Colombia, a mostrar su apoyo y compromiso con el depuesto líder opositor
Guaidó, el autoproclamado «presidente interino» venezolano de 36 años, perdió su puesto como presidente de la asamblea nacional controlada por la oposición a principios de este mes, con varios de sus antiguos aliados abandonándolo y eligiendo un nuevo líder. Bloqueado para ingresar al edificio del parlamento en el centro de Caracas y derogada su figura como mandatario, Guaidó busca el apoyo de Pompeo en Colombia para mantenerse en su puesto.
La semana pasada, Norteamérica apuntó a Luis Parra, el nuevo presidente electo de la asamblea nacional, con sanciones, acusándolo de obstruir los procedimientos del parlamento, el viernes, en una rara entrevista con los medios estadounidenses, el presidente Nicolás Maduro indicó que solo una nueva «relación de respeto y diálogo» podría conducir a una relación «ganar-ganar» entre Venezuela y Estados Unidos.
Maduro agregó que, Washington tendría que cancelar sus duras sanciones económicas y su trabajo para normalizar las relaciones diplomáticas para que esto suceda, el presidente desestimó las afirmaciones de que estaba aislado internacionalmente, destacando que su gobierno tenía el control del país y que el intento de golpe de Estado de Guaidó había fracasado.
Guiado se proclamó a sí mismo presidente interino, por primera vez, el 23 de enero de 2019, poco después de que Maduro asumiera un segundo mandato y fue inmediatamente reconocido por los Estados Unidos y sus aliados latinoamericanos y europeos.
Maduro acusó a Guaidó de intentar llevar a cabo un golpe de estado respaldado por el extranjero destinado a permitir que los países extranjeros tomen el control de los vastos recursos petroleros y minerales de Venezuela, los norteamericanos y sus aliados respaldaron su apoyo político a Guaidó, congelando los activos venezolanos en el extranjero y transfiriendo el control de algunos de estos recursos a el gobierno interino.
Caracas calcula que se han robado decenas de miles de millones de dólares en activos en el extranjero, además de su asistencia política a Guaidó, Washington ha amenazado reiteradamente con intervenir militarmente en Venezuela, lo que provocó que el presidente Maduro advirtiera que Estados Unidos podría experimentar una «repetición de Vietnam» si se atrevía a invadir.
Aunque Estados Unidos, sus aliados latinoamericanos y varios países europeos han reconocido a Guaidó como el líder legítimo de Venezuela, Rusia, China, Cuba y otros cientos de países han continuado cooperando con el gobierno de Maduro.
