Grupos de interés tocan el hombro a Bolsonaro

A penas un par de días antes de la elección y con la victoria a la vista en la carrera presidencial de Brasil con aun más del 10% de la intención de voto, frente al izquierdista Fernando Haddad, que ha remontado más del 20% estas últimas semanas, el candidato de ultra derecha Jair Bolsonaro se enfrenta a la presión de los grupos de interés que lo respaldaron para cumplir sus promesas y abandonar los planes de fusionar los ministerios.

Entre los más multitudinarios, los grupos conservadores que van desde evangélicos hasta agricultores y legisladores a favor de las armas de fuego han visitado al favorito en las encuestas en su casa durante la semana para asegurarse de que sus agendas estén en primer plano si como se espera, se convierta en presidente electo el domingo.

Industriales e inversionistas conversaron con Bolsonaro, pues estos se oponían a la combinación de los ministerios de finanzas y planificación con la cartera de la industria y el comercio en un súper ministerio encabezado por su gurú de política económica, Paulo Guedes, “si este es su interés, por el bien del país, mantendremos el ministerio de comercio e industria, no hay problema», comentó Bolsonaro en una presentación en Facebook el miércoles por la noche.

El candidato ultraderechista y ex capitán del ejército, se está confeccionando en una plataforma anticorrupción con el objetivo de poner fin al comercio tarifado de la política brasileña y originalmente había planeado reducir el número de ministerios de 29 a 15 para reducir el injerto y el patrocinio, entro otros males que se supone, dejaron en la cartera ministerial los gobiernos petistas.

Para Bolsonaro, la cultura y el deporte, deben ser parte del ministerio de educación

El movimiento estratégico que más polvo ha levantado es el de unificar los ministerios de agricultura y medio ambiente que ha desatado una tormenta de críticas de los ambientalistas que dicen que socavaría el compromiso de Brasil de proteger la selva tropical del Amazonas, una cuestión que está poco clara, dadas las posturas del candidato sobre los pueblos originarios y la industrialización de la selva.

Criticas que han provenido incluso desde los agricultores brasileños que son fanáticos de las promesas de Bolsonaro, de relajar las normas ambientales y limitar las reservas indígenas, están pensando dos veces en la fusión porque podría perjudicar sus exportaciones al enojar a los consumidores ambientalmente conscientes en el extranjero, “ha habido cierta fricción sobre si el ministerio de medio ambiente debería fusionarse con el ministerio de agricultura, por mi parte, estoy listo para negociar», comentó Bolsonaro, bajando la cabeza frente a los grupos de poder.

Pero la más controvertida de las leyes que ha prometido Bolsonaro al lobby de la granja, es la flexibilización de las leyes de control de armas que permitirá armarse contra el aumento del crimen en las áreas rurales y urbanas, esto podría suceder antes de que asuma el cargo el 1 de enero si derrota al candidato del partido obrero de izquierda, Fernando Haddad.

Ya Rodrigo Maia, presidente de la cámara baja del congreso de Brasil, mismo que ha aunado fuerzas con el derechista para perpetuarse en el puesto, comentaba el miércoles que pretende seguir adelante con el tema después de la votación del domingo, pues, aunque el tema sea de gran interés para los brasileños por su implicación sobre la pacificación de las bandas armadas y el aumento de la criminalidad, es álgido en este momento.

Las propuestas en el congreso cambiarían el estatuto de desarme de Brasil de 2003, que prohibía a todas las fuerzas públicas, excepto a las de seguridad, llevar armas, y facilitaría a los brasileños comprar armas y poseer armas en sus hogares y granjas para su auto protección, muchos han estado en contra de esta ley que pondría cientos de millones de balas en la calle.