Exiliados venezolanos sueñan con volver a su país mientras ven los sucesos desenvolverse
Cientos de exiliados convergen en las embajadas y consulados alrededor del mundo para lanzar su peso detrás de la tentativa de golpe de estado, encabezada por Juan Guaidó y Leopoldo López, para derrocar a Nicolás Maduro.
Los partidarios del líder de la oposición venezolana Juan Guaidó queman una foto del expresidente Hugo Chávez durante una manifestación frente a la Embajada de Venezuela en la ciudad de México el martes, imágenes como esta se repitieron alrededor del mundo.
El sol no había llegado asomado por el horizonte y ya en la ciudad de México los teléfonos móviles de miles de venezolanos exiliados estaban zumbando con la noticia de un levantamiento militar y un golpe de estado.
«Me desperté con el mensaje», afirma Carlos Beck, de 60 años, natural de Maracaibo que fue uno de las decenas de exiliados que llegaron a su embajada el martes para lanzar su peso detrás de la tentativa de golpe relámpago contra el presidente venezolano Nicolás Maduro, «fue una agradable sorpresa».
Con noticias las noticias bullendo en las redes y en los medios de información más importantes, sobre el impulso para derrocar a Maduro, que ya estaba en marcha, cientos de manifestantes convergieron en el edificio y en otras embajadas y consulados alrededor del mundo, llevando pancartas exigiendo el cambio y su recién reavivado sueño de regresar a casa.
«Estoy totalmente convencido de que hoy es el día,» destacó Yoraco Falcón, un conductor de Uber de 30 años de edad que abandonó Venezuela con su familia en agosto pasado a causa de su colapso económico y ahora vio una oportunidad de regresar a casa.
Más de que 3 millones de venezolanos han huido de su país desde 2015, impulsado por la hiperinflación, la escasez de alimentos y medicinas, por ello el martes, algunos se aferraron a la esperanza de que podrían regresar pronto.
«Echamos de menos Venezuela, la amamos», agregó Falcón que había venido a la manifestación con su hijo de dos años de edad, Ethan y un banner que dice: «¡Fuck you, Maduro!».
«Tan pronto como caiga el gobierno de Maduro, muchos de nosotros vamos a regresar… Quiero mi hijo crezca en Venezuela al igual que lo hice yo”, afirma Falcón.
Oriette Ledezma, la hijastra del líder de la oposición en el exilio Antonio Ledezma, también estuvo entre las multitudes y asimismo estaba convencida de que el lanzamiento de la «Operación libertad» de Juan Guaidó significaba que maduro estaba ya de salida.
Maduro se aferraba al poder mientras disidentes y partidarios discutían al rededor del mundo
Como más y más manifestantes anti Maduro acudiendo a las embajadas venezolanas de Lima, España, Bogotá, Santiago de Chile y más países dentro del continente, muchos ya insistían que no había manera detrás del dramático desafío del amanecer del martes, «hoy representa la liberación de nuestro país», afirmaban muchos, pero no todos estaban de acuerdo.
Entre los partidarios del líder de la oposición venezolana Juan Guaidó discutieron, partidarios del presidente Nicolás Maduro durante la protesta afuera de la embajada venezolana en ciudad de México y en Buenos Aires, Argentina, tuvieron que ser reprimidos por la policía, lo que causó algunos heridos.
«Por supuesto estamos asustados porque el régimen de Maduro está formado por criminales, no por políticos», indicó de la posibilidad de violencia en Venezuela, «pero tenemos mucha fe de que, las fuerzas armadas finalmente van a apoyar la democracia».
El representante de Guaidó en México, Reinaldo Díaz, enviaba un mensaje de la oposición a Maduro, la única manera de evitar el derramamiento de sangre es que se haga a un lado: «¡fuera, mientras que todavía puedes… Móntate en tu avión y vete».
En la capital de Estados Unidos, Washington, hubo al parecer tensas escenas fuera de embajada de Venezuela con miembros de la oposición que se enfrentaron a activistas pro gobierno de Maduro que han estado ocupando el edificio.
En varias capitales de todo el mundo, también hubo enfrentamientos y policías ocuparon las entradas de las embajadas y consulados de Venezuela, para evitar más brotes de violencia.
Un pequeño grupo de mujeres mexicanas en su mayoría ancianas afirmaron que habían llegado a denunciar lo que llamaron la trama imperialista que derrumbó el gobierno legítimo de Maduro, «Apoyamos la soberanía. Estamos contra el intervencionismo. Estamos en contra de los trucos de Trump. No queremos una invasión», afirmó Sofía Nava, mexicana de, 47 años, detrás de ella, se lee un signo pegado en la cerca de la embajada: «Saca tus manos fuera de Venezuela, Trump y sus lacayos».
María Elena de la Torre, también mexicana de 68 años, indicó: «La revolución bolivariana no ha dañado nunca nadie. La revolución bolivariana quiere la paz… Total rechazo al intento de golpe militar, ¡Viva la revolución bolivariana!»
La mayoría esperaban noticias de la búsqueda de Guaidó de destronar al heredero de Hugo Chávez, Falcón acusó a los Chavistas de destruir la economía venezolana y a sus personas. «No había manera para llevar una vida digna», explicando la decisión de su familia a huir.
«Hoy estamos aquí para celebrar,» se entusiasmó Beck, «No sé lo que está sucediendo ahora mismo en Venezuela porque no tenemos noticias de primera mano,» admitió el empresario venezolano que lleva 16 años en el extranjero. «Pero estoy seguro que estos pasos que estamos dando significan que muy pronto que la usurpación se acabará. No hay duda sobre ello».
