De la energía a la seguridad: ¿Biden obtuvo todo lo que quería de Arabia Saudita?
La visita de Joe Biden a Arabia Saudita y la reunión con el príncipe heredero Mohammed bin Salman causó un verdadero revuelo. Pero, la energía que busca el presidente estadounidense en Oriente Medio, no es sencillo. Pero, ¿Logró Biden restablecer las relaciones con el KSA y afirmar las posiciones de liderazgo de Estados Unidos en la región?
El tema de la energía parecía ser la verdadera razón detrás de la visita de Biden al reino saudí, que prometió convertir en un «estado pario» en la campaña electoral en 2019-2020. Desde principios de 2021, los precios del petróleo se disparan a más del doble en los Estados Unidos, lo que llevó a la administración Biden a buscar formas de convencer a los saudíes y otros aliados de la OPEP de aumentar la producción de crudo para reducir los costos de la energía.
«La política petrolera en Arabia Saudita está prácticamente establecida», indicó el Dr. Ahmed Al Ibrahim, analista político con sede en Riad. «Están monitoreando el mercado y están flotando el mercado con cadenas de suministro consistentes con la demanda. No pueden exagerar porque no ayuda al mercado y a los miembros de la OPEP+”.
Pero, “Arabia Saudita está agobiada por los contratos en los que realmente no pueden ir por sí mismos y tomar la decisión. Son parte de una OPEP+ y estos países, afirman que son muy eficientes y sus precios de la energía son muy buenos».
El politólogo destacó que «no hay margen para elogiar a Estados Unidos solo porque necesitaban más petróleo en el mercado por la razón que sea». Además, según el profesor, el mercado del petróleo ya está saturado de petróleo. y una extracción adicional solo puede alterar el equilibrio.
Los EEUU, están sedientos de energía, venga de donde venga, pero habrá un costo sobre ello
El 30 de junio, funcionarios de la OPEP, Rusia y otros países productores de petróleo confirmaron su decisión tomada en mayo de aumentar la producción en 648 mil barriles por día en agosto. «Creo que la mayoría de los países de la OPEP+ alcanzaron casi la producción máxima». Explicó Al Ibrahim, y agregó que no ve una manera de aumentar considerablemente la extracción de petróleo en el futuro previsible.
El príncipe heredero Mohammed bin Salman declaró el 16 de julio que lo único que la Riad puede hacer, es aumentar la producción de crudo de 10 millones de barriles por día a 13 millones por día para 2027. Y agregó que no hay capacidad adicional más allá de eso.
Mohammed, también destacó que se requieren esfuerzos unificados para mantener a flote la economía mundial, y que las políticas poco realistas con respecto a las fuentes de energía podrían instigar una mayor inflación.
Mientras tanto, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, están buscando el compromiso concreto de los Estados Unidos para mejorar los lazos mutuos. Durante la Cumbre de Jeddah para la Seguridad y el Desarrollo del 16 de julio, que reunió a los seis miembros del Consejo de Cooperación del Golfo junto con Egipto, Jordania e Irak, Biden prometió que Estados Unidos seguiría plenamente comprometido con el Medio Oriente.
Biden sigue perdiendo poder en el mundo
El presidente de Estados Unidos se refirió particularmente que Estados Unidos no «dejaría un vacío para ser llenado por China, Rusia o Irán». «Tendremos que tomar de la palabra del presidente Biden que Estados Unidos no está dando la espalda a la región, que Estados Unidos defenderá sus intereses en la región», afirmó el Dr. Abdulkhaleq Abdulla, profesor de ciencias políticas en la Universidad de los Emiratos. «Sin embargo, el futuro revelará hasta qué punto eso es cierto».
El Dr. Ahmed Al Ibrahim se hace eco de las preocupaciones del profesor emiratí: mientras que Estados Unidos y especialmente su comunidad militar y de inteligencia siguen siendo un aliado importante para Arabia Saudita. La Riad no puede confiar en el estado de ánimo rápidamente cambiante del establishment demócrata, citando el reciente giro en U de Biden.
