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Cruz Roja triplica ayuda a Venezuela

La organización avanza en medio de la distención de Maduro

El comité internacional de la Cruz Roja triplica su ayuda a Venezuela, un día después de que líder del país sitiado, aislado y desgarrado por la crisis aprobó la entrega de asistencia humanitaria, sólo a través de este organismo.

La organización anunció el aumento de su presupuesto, mientras otros países le piden a la ONU, reconocer la magnitud de la crisis que enfrenta Venezuela y justo en medio de los continuos movimientos por parte de la administración de Trump para persuadir a otros países a realizar sus demandas del retiro de presidente Nicolás Maduro.

Con el sistema de salud en colapso, la común escasez de alimentos y más recientemente, enfrentando una crisis de electricidad, el gobierno de Maduro ha sido acusado de deliberadamente minimizando la magnitud de los problemas que enfrenta el país, mientras millones han huido por sus fronteras.

Un informe conjunto que Human Rights Watch y la escuela de salud pública Bloomberg de la universidad Johns Hopkins de la semana pasada, instó a las naciones unidas a tomar una posición en lo que describió como una «compleja emergencia humanitaria» y solicitó una respuesta internacional de igual «escala».

El informe de 71 páginas a documentado el aumento de muertes maternas e infantiles, la propagación de enfermedades prevenibles como el sarampión y la difteria y fuertes aumentos en la transmisión de la malaria, la tuberculosis y otras enfermedades infecciosas.

La organización basada en Ginebra, al anunciar el aumento de la ayuda, afirmó: «el CICR ha triplicado su presupuesto para operaciones en Venezuela de unos 9 millones de dólares a cerca de 24. 6… El impulso financiero verá al CICR expandir su trabajo sobre cuatro cuestiones humanitarias apremiantes: salud, agua, saneamiento y la detención de la migración».

Venezuela.
Mientras la administración de Donald Trump, trata torpemente de lograr cambiar la opinión internacional, Maduro logra avances en la remisión de la crisis nacional.

La Cruz Roja, al fin logra su entrada en Venezuela

La presión para enviar mayor ayuda al país rico en petróleo, pero en implosión, sigue los torpes esfuerzos de la administración de Donald Trump para politizar la entrega de ayuda de Estados Unidos, con el fin de apuntalar el apoyo al líder de la oposición Juan Guaidó, que Washington y 51 países más, han respaldo como líder interino de Venezuela, por encima de Maduro.

Maduro, sin embargo, cuenta con el apoyo de Rusia y su posibilidad de veto, copmo miembro del consejo de seguridad de la ONU, China, Irán, Cuba y otra decena de países.

La guerra de palabras entre Washington y Caracas a estalló otra vez el miércoles cuando Mike Pence, vicepresidente norteamericáno, pidió a la ONU revocar las credenciales de los representantes de Maduro ante este organismo.

En el mismo día, el secretario de estado, Mike Pompeo, describió el gobierno de Maduro en el congreso estadounidense, como «una verdadera amenaza para los Estados Unidos de América».

Por su parte, Maduro ha negado durante mucho tiempo que el país sufre una crisis humanitaria por si sólo y culpa a las sanciones con que los Estados Unidos han estrangulado la economía del país sudamericano por sus problemas económicos.

Peter Maurer, presidente del CICR, fue a Venezuela esta semana, siendo la primera visita al país realizada por el jefe de la organización en un cuarto de siglo.

«Estoy satisfecho con la disposición de las autoridades a trabajar con nosotros para abordar las necesidades humanitarias, se han identificado de forma consensuada», comentó Maurer en el comunicado.

El tema de la ayuda humanitaria se ha vuelto tensa en Venezuela tras un enfrentamiento causado por el intento de Juan Guaidó de introducir a la fuerza algunos camiones con supuesta ayuda humanitaria desde varios puntos en la frontera, con la interdicción del gobierno norteamericano el 24 de febrero de este año.

Pero el esfuerzo no tuvo frutos, pues el ejército venezolano, la sociedad civil y otros grupos de defensa, conocidos como colectivos, bloquearon la frontera en un puente que da acceso a Colombia, resultando incendiados un par de camiones a manos de los mismos que lo intentaban dirigir.

Maduro en ese momento, afirmó que la ayuda era un preámbulo a una intervención militar para expulsarlo del poder, de allí que entre los escombros de los camiones se encontraron mascarillas de oxígeno, alambre para concertinas y silbatos.

Maurer confirmó, que durante su visita presenció el sufrimiento de Venezuela y de los venezolanos «debido al deterioro de los frágiles servicios básicos», con hospitales que luchan para garantizar agua, energía, medicamentos, insumos y hasta personal básico.

Un cuarto de los 30 millones de venezolanos, tienen urgente necesidad de ayuda humanitaria, según un informe interno que la ONU emitió el mes pasado.

La ONU calcula que 3,7 millones de venezolanos están desnutridos y 22% de niños menores de cinco años sufren de desnutrición crónica, a pesar que más de 3 millones, han abandonado el país en los últimos 5 años.

Fuente
ICRCCNN

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