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Cataluña enardecida por detención de separatistas

El movimiento hasta ahora pacífico, se ha desbordado sin liderazgo político

Las manifestaciones se están intensificando en Cataluña, con incendios que arrasan las calles de Barcelona y manifestantes bloqueando las carreteras, los enfrentamientos se producen a raíz de una decisión de la corte suprema española de encarcelar a nueve líderes independentistas.

La situación actual se deriva principalmente de las sentencias emitidas el lunes, aunque además hay una mezcla de tácticas de movilización social, por una parte, donde hay algunas marchas planificadas hacia Barcelona, ​​en el contexto de la huelga general que se convocó para mañana.

Este sábado habrá otra manifestación que se espera que como las anteriores, estarán repletas de incidentes que ocurren durante las tardes en lugares simbólicos en la región, principalmente las delegaciones del gobierno central.

Durante la última semana, ha habido momentos de tensión, debido a las intervenciones de la policía y la actitud de los manifestantes, lo que ha llamado la atención de los medios de comunicación locales, nacionales e internacionales.

Las protestas en Cataluña parecen estar justificadas, aunque no con tanta intensidad, pero, se pudiese pensar en lo que ha desencadenado esta situación, entre los nueve y quince años de prisión para los líderes de la independencia catalana y en una perspectiva más amplia, en que se está experimentando los efectos de la falta de voluntad del gobierno central para canalizar estas demandas políticas por medios democráticos.

Crisis en Cataluña.
Nueve ex funcionarios catalanes fueron condenados a prisión por organizar un referéndum de independencia el 1 de octubre de 2017, donde más del 90% de los votantes participaron y afirmando el “sí” a la independencia de Cataluña de España.

Los líderes independentistas de Cataluña fueron detenidos este lunes por actos contra España

Al negar el referéndum o algún otro mecanismo potencial de diálogo, se puede presenciar, una combinación entre el proceso continuo a largo plazo, que son las demandas políticas contradictorias sobre la autodeterminación de Cataluña y el descontento general en la región por la violenta respuesta del gobierno central contra los manifestantes.

El movimiento independentista ha sido orgullosamente pacífico hasta ahora, pero a pesar de que la imagen actual de la situación en Cataluña, con disturbios, peleas en las calles y motines sociales, está ocurriendo por primera vez, los desmanes son producidos por la falta de liderazgo, pues los líderes políticos están ahora en la cárcel, lo que ha descabezado el movimiento pro independentista.

Durante mucho tiempo el movimiento independentista catalán esperaba la intervención o la mediación de la comunidad internacional, y en particular de la Unión Europea, pero nada ha cambiado en este sentido.

La situación que se está tornando democráticamente peligrosa, aunque no importa cuán pacífica o violenta sea está dejando una huella en la comunidad internacional y la dentro de la unión europea en particular, pues estas instancias no podrán intervenir para facilitar una solución política.

 Al igual con los actos de vandalaje ocurridos en las últimas horas, los mossos o policías locales en varias ciudades de Cataluña han cargado a golpes contra los manifestantes, quienes contestaron la agresión con petardos y cocteles Molotov.

En las cuatro capitales de provincia catalanas se aprecia la resaca de una noche de miércoles en la que ardieron las calles, especialmente en Barcelona, Girona y Tarragona, según el ministro del interior se han detenido a 97 personas desde el lunes y el sistema de emergencias médicas, mostró una cifra de 96 heridos en toda Cataluña.

Fuente
ElPaisElPeriodicoLaVanguardia

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