Presidente de Chile recibe borrador de nueva constitución
El nuevo proyecto de constitución de Chile fue presentado al presidente Gabriel Boric. Después de un proceso de un año que vio a los miembros de la asamblea constituyente debatir y redactar un documento para reemplazar la carta magna de la era Pinochet del país.
El nuevo texto, que reemplazará a la constitución escrita durante la dictadura de Augusto Pinochet entre 1973 y 1990, tiene como objetivo establecer nuevos derechos sociales, que encabezará el presidente Boric.
A Boric, se le entregará un país cero kilómetros, luego de que fue elaborada por la convención constitucional. Una asamblea constituyente de 154 ciudadanos, la mayoría de los cuales eran políticos independientes, que se disolverá un año después de que comenzó a funcionar el 4 de julio de 2021.
«Debemos sentirnos orgullosos de que durante la crisis más profunda… en décadas que vivió nuestro país, los chilenos eligen más democracia, no menos», señaló Boric. Quien fue, un ex líder de las protestas de la izquierda que juró el cargo en marzo.
De esta manera, Boric tiene la labor de implementar y respetar la nueva constitución
Gabriel Boric, inmediatamente firmó un decreto convocando un referéndum para el 4 de septiembre. Donde el voto en el país profundamente polarizado de 19 millones de personas será obligatorio.
«Este 4 de septiembre, una vez más serán las personas las que tendrán la última palabra sobre su destino», indicó Boric también en un tuit. «Hoy comienza una nueva etapa donde todos hacen historia».
En el primero de los 388 artículos de la nueva constitución, Chile es descrito como «un estado de derecho social y democrático». Además de «plurinacional, intercultural y ecológico».
Chile «reconoce la dignidad, la libertad, la igualdad sustancial de los seres humanos. Y su relación indisoluble con la naturaleza como valores intrínsecos e inalienables», indica la nueva constitución.
Los chilenos votaron el año pasado por los miembros de la convención constitucional. Quienes trabajarían para reemplazar la constitución anterior. Los críticos culparon de las desigualdades socioeconómicas de larga data en la nación sudamericana.
Los llamados a una nueva constitución surgieron de las protestas masivas de 2019. Que estallaron en ira por el aumento de los costos de vida y otros problemas.
Hartos del statu quo político e instando a reformas sistémicas, los votantes chilenos eligieron a docenas de delegados progresistas e independientes.
Para redactar la nueva constitución, asestando un golpe sorpresa a los candidatos conservadores que no lograron asegurar un tercio de los escaños para vetar cualquier propuesta.
Dividida en partes iguales entre hombres y mujeres, la convención constitucional también contenía 17 escaños reservados para los pueblos indígenas. Que representan alrededor del 13 por ciento de la población de Chile.
