80% de la matrícula de las escuelas se ha perdido este año en Venezuela
“Los niños se fueron y no han regresado a las escuelas”, según el informe publicado el jueves por la organización no gubernamental, Funda Redes, casi el 80% de los niños venezolanos han abandonado su estatus escolar y no han retornado a las escuelas, las asombrosamente altas tasas de ausentismo en la educación son síntoma de la devastadora situación del país, que ha dejado a millones de personas hambrientas y sin recursos básicos como medicinas, alimentos, agua y electricidad.
El estudio encontró que más del 78% de los niños no han asistido a la escuela en algún momento en 2019 y el 66% no asiste regularmente, la tendencia se ve agravada por el ausentismo del personal docente, aproximadamente del 67% de los cuales faltan regularmente al trabajo, a menudo debido al desmoronamiento del sistema de transporte del país.
Venezuela está luchando bajo la presión de las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea, una respuesta a los intentos de sacar a Maduro a favor de un gobierno moderado y alineado con los preceptos norteamericano y la doctrina Monroe.
La crisis es el resultado de casi 20 años de gobierno socialista, donde el salario mínimo mensual es ahora equivalente a menos de 5 dólares al mes, en medio de la crisis, millones de venezolanos huyen del país todos los días.
La huida se produce principalmente a Colombia, Perú, Ecuador y Brasil, en lo que se ha convertido rápidamente en una de las principales crisis migratorias del mundo, donde la educación no es un problema más importante que la alimentación y las escuelas no son más importantes que la política.
Funda Redes también encontró una escasez de materiales didácticos y tecnológicos para el trabajo en el aula y una falta de libros de texto actualizados para estudiantes y maestros, muchas escuelas han tenido que cerrar debido a la falta de personal y los cortes de energía que atascaron casi todos los servicios públicos.
La escuela debe ser el pilar de la comunidad, pero en Venezuela ese pilar se ha perdido
Al presentar el informe al ministerio público de Venezuela, el director general de la organización, Javier Tarazona, comentó que la situación actual «representa una emergencia humanitaria en la educación» y solicitó la «restitución inmediata del derecho a la educación plural y democrática gratuita».
«Hay una violación sistemática del derecho a la educación y también estamos hablando de ausentismo escolar que supera el 66% de los niños, que terminan no asistiendo a la escuela con frecuencia», afirmó Tarazona.
El informe también subrayó la falta crónica de alimentos en el país, donde encontró que el 87% de las escuelas no cumplen con el programa de alimentación escolar que otorga a los niños el derecho a recibir comidas gratis y re las pocas escuelas que logran proporcionar comidas, en el 96% de tales casos, la comida no cumple con los requisitos nutricionales básicos establecidos por el instituto nacional de nutrición.
Aunque las escuelas tienen sus propios programas para alimentar a niños hambrientos, los suministros rara vez proporcionan la nutrición necesaria que la mayoría de los niños necesitan y la mayoría de las entregas no cubren los cinco días de la semana, y en los días en que la comida está disponible, hay una notable falta de proteínas, y la mayoría de las comidas se componen de pasta, arroz y salsa.
Muchas organizaciones benéficas y trabajadores humanitarios ahora están interviniendo para ayudar a mitigar el hambre y reducir la tasa de ausentismo, pero alrededor de la mitad de los niños venezolanos no asistían a la escuela debido al hambre y es probable que esa cifra haya empeorado desde el pasado año.
Con respecto a la educación superior, el informe también encontró que, en 50 de las principales universidades del país, el 65% del personal docente, administrativo y laboral ha realizado solicitudes de licencias sabáticas y licencias no remuneradas, también hay altas tasas de ausentismo entre los estudiantes, muchos de los cuales tienen dificultades para asistir a clases debido a problemas de transporte o la necesidad de trabajar.
«Las universidades venezolanas están atravesando el momento más oscuro de la historia de la República», explicó Tarazona, la ruptura de la educación es una de las muchas crisis resultantes de las políticas mal aplicadas por el gobierno, que no ha logrado controlar la desmedida inflación que ya ronda el millón por ciento anual.
Según las cifras de la comisión económica para América Latina y el Caribe de las naciones unidas, alrededor del 90% de la población venezolana vive en la pobreza, una realidad que ha llevado a miles de personas a huir del país todos los días, muchas de las cuales necesitan asistencia y ayuda humanitaria.
