Edinho Silva recibió amenazas de muerte tras imponer frenos al Covid
Brasil se ha convertido en un sinónimo de mala gestión del Covid-19, pero la ciudad de Araraquara, está siendo defendida como un modelo de cómo hacer frente al coronavirus. Pero las medidas tienen detractores.
Araraquara, una ciudad industrial de 240 mil habitantes en el estado de Sao Paulo, a 270 kilómetros de la capital administrativa del mismo nombre. La localidad implementó un encierro de 10 días en febrero.
El cierre general, incluyó el cierre de supermercados y transporte público. Y probó agresivamente a los ciudadanos y detectó la presencia de la variante P1 más infecciosa a tiempo.
El resultado de la medida en Araraquara, demostró una caída dramática de las infecciones, hospitalizaciones y muertes. «Es innegable que el encierro es una medida amarga y difícil de tomar, pero da resultados», señaló su alcalde Edinho Silva.
Lo que hizo Araraquara fue seguir el modelo que de consenso en todo el mundo
Silva también ha recibido amenazas de muerte en línea después de instituir las medidas. Subrayando el carácter altamente politizado y volátil de la crisis brasileña del Covid-19. «No me intimidan», indicó.
«Brasil está viviendo un momento muy difícil, donde se está fomentando el odio, la violencia y las personas que se arman». Pero, el éxito de Araraquara se produce en medio del aumento de las cifras de muertos en todo el país.
Más de 66 mil personas murieron debido al coronavirus solo en marzo, y se espera que abril sea aún peor. Hasta la fecha, menos del 10% de los 211 millones de ciudadanos del país han sido vacunados, y los expertos en salud están hablando más sobre la necesidad de implementar bloqueos y medidas restrictivas.
Las muertes por Covid-19 en Araraquara, cayeron a cero, mientras que apenas se registraron 30 y 26 nuevos casos. La mayoría de las camas hospitalarias de la ciudad están ocupadas por ciudadanos de otras ciudades y estados.
El alcalde declaró el cierre un día después de que la ciudad registrara su mayor número de nuevos casos con 248. Y poco más tarde, que las muertes relacionadas con el coronavirus duplicaran.
Un mes después de la implementación del encierro, hubo una caída del 39 por ciento en las muertes y una caída del 57.5 por ciento en los casos en la ciudad. En Araraquara, como en muchas otras ciudades brasileñas, grupos de empresarios partidarios del presidente manifiestan su descontento con las medidas.
