Los millennials son conocidos como la generación progresista, la que domina la información, los amos de la tecnología, son ellos quienes debido al boom de la liberación sexual de los años 80 se han convertido en una fuerza de cambio en México y todo el mundo, ya que por su número y manejo de las tendencias mundiales representan el 30% del patrón electoral azteca en vista a las elecciones del próximo 1 de julio, el peso del voto millennials de acuerdo con datos del INE es de unos 12 millones de electores, la poco más de la cuarta parte de los 88 millones de ciudadanos que registra el instituto nacional electoral.
Los millennials representan una tendencia abierta, definidamente liberal y progresista, que no está limitada por la conciencia política de las generaciones precedente, el ejemplo más claro es su postura ante el matrimonio del mismo sexo o el consumo libre de drogas y hasta la aptitud hacia el sexo, eso los pone en mentís con la postura de los partidos conservadores con valores arraigados y ortodoxos.
“Los candidatos están poniendo particular énfasis en su aproximación con los millennials, los ves mucho más activos subiendo fotografías y comentarios en redes sociales”, explica Esteban Polidura, director de inversiones para México en UBS.
Esta es la primera vez que los comandos de campaña, concentra la mayor parte de los mensajes en redes sociales, por muchas razones, por el coste y el alcance de los mismos, pero sobre todo porque en ellos se concentra la atención de los nuevos votantes, y de allí que los partidos políticos se abalancen a las redes para buscar cautivar a estos votantes.
Los millennials son toda una fuerza de cambio
Los millennials no siguen tendencias, las marcan, es por ello que “este grupo de votantes se caracteriza por abstencionismo en procesos electorales y una baja participación política, lo que también puede definir un resultado el 1 de julio”, comenta Polidura.
La atención de los comandos de campaña debe estar enfocada en los medios, “Se trata de leer entre líneas y entender el sentimiento de los mensajes que navegan en redes sociales, eso es lo que va a ser crítico”, afirmó el especialista.
Polidura explica que el análisis debe estar enfocado no sólo en el número de seguidores que alcanza un candidato y que se registren en las plataformas digitales, sino que más bien debe estar enfocado, en el comportamiento que muestran estos a través de las redes, su opinión es la que crea la tendencia.
Los candidatos, deben generar fidelidad y crear tendencia entre estos jóvenes, “No es nada más ir, subirse y hablar del tema, sino que empiezan a tomar fotos desde el camino hacia a eventos, selfis con el grupo de gente que los apoya y videos cortos que puedan subir a redes sociales”, pues el voto joven es determinante en estos comicios, pero es un voto generado en la asociación con cosas buenas, está representado por la sinceridad y lo que irradie el candidato, sin llegar a ser exagerado, pues se puede convertir en el viejo que usa pantalón corto.
Es en este caso, cuando los “likes” o “me gusta” de Facebook, tienen más peso que la cantidad de followers de Twitter, porque se convierten en son un referente de proximidad de los candidatos, hacia los votantes jóvenes, desde imágenes y videos hasta comentarios en redes y un vocabulario más familiarizado con la generación.
Son estos 12 millones de electores, los que han convertido a las próximas elecciones en México en históricas por infinidad de razones, pero sobre todo porque de la decisión de los millennials dependerán resultados y es una ocasión casi única en que seán los jóvenes nacidos después del año 2000, pues son los que han cultivado un nivel de conciencia diferente al resto de la sociedad.
Los analistas coinciden que históricamente los jóvenes no tienen participación política relevante y es sólo en algún caso aislado, como cuando los jóvenes universitarios encantados por el comunismo, se unieron a los partidos de izquierda, que de verdad se convierten en una fuerza a vencer.
Es por ello que el 89,6% de los jóvenes señala que la política «les importa poco o nada», pues las decisiones de los millennials para cualquier decisión trascendental en su vida son meramente viscerales, por los que los estudios y las encuestas no mienten y parecen respaldar el supuesto posible de que los jóvenes presentan una extendida apatía hacia la política.
Checa la composición por edades del padrón electoral @INEMexico y el fuerte peso de la juventud. Además 12 millones de jóvenes podrán votar por vez primera en una elección presidencial. Vota libre. pic.twitter.com/THuKYJYhHZ
— Ciro Murayama (@CiroMurayamaINE) May 31, 2018
