Ortega da el primer paso en el dialogo de paz
Gobierno de Nicaragua acordó el miércoles 20 de marzo, liberar los prisioneros de la oposición detenidos durante las manifestaciones de abril pasado, en un lapso de 90 días, con el fin de dar el primer paso, para reiniciar las conversaciones de paz estancadas encaminadas a poner fin a una crisis política de 11 meses.
El enviado especial de la OEA, Luis Ángel Rosadilla, informó en una conferencia de prensa que el gobierno del presidente Daniel Ortega había accedido a liberar «todas las personas detenidas en el contexto de las protestas» que iniciaron en abril del año pasado, que dejaron a más de 700 personas detrás de las rejas y 325 muertos.
El acuerdo incluye sean levantadas las sanciones contra el régimen de Ortega, el pasado fin de semana, el gobierno nicaragüense liberó un segundo grupo de presos tras las demandas de la oposición antes de que continúe el diálogo político para negociar una salida a una crisis nacional.
El ministerio del interior comunicó que 50 personas, que la oposición considera presos políticos, habrían sido liberadas, para unirse a otros 100, que fueron redimidos el 27 de febrero, cuando las conversaciones del día entre el gobierno y sus opositores había reiniciado.
Las conversaciones se rompieron cuando la oposición quiso continuar en la mesa de diálogo condicionando su participación a la liberación de «todos los presos políticos».
Un comité que representa a familiares de los detenidos afirmó que hay todavía más de 570 presos en custodia, el lunes, la alianza opositora suspendió las conversaciones que habían comenzado el 27 de febrero después de que 100 manifestantes fueron detenidos temporalmente el sábado por la policía que utilizó gases lacrimógenos para impedir una protesta contra el gobierno de Ortega.
Nicaragua vuelve lentamente a la calma y a la paz en medio de sanciones
La alianza cívica por la justicia y la democracia, ACJD, habría indicado el martes que no reanudaría las conversaciones hasta que fuesen soltados todos los «presos políticos» y cesara la represión extrema de los manifestantes contra el régimen de Ortega.
Versiones preliminares de voceros de la OEA y el gobierno, expusieron que las liberaciones podrían comenzar esta semana y que no habrá nadie detenido más allá de esos 90 días.
El comité internacional de la Cruz Roja se encuentra monitoreando el proceso, por lo que las dos partes han acordado en una fase de negociación de seis puntos para acompañar a las liberaciones y pidieron apoyo internacional en la aplicación de los acuerdos alcanzados, según una declaración emitida por la presidencia.
«Una llamada se hará a la comunidad internacional para suspender las sanciones, para facilitar el derecho al desarrollo humano, económico y social de Nicaragua, favoreciendo a los sectores más vulnerables de la población», expuso la declaración.
El gobierno de Nicaragua se ha visto afectada por las sanciones de Estados Unidos y la amenaza de más de ellas de la Unión Europea desde el año pasado, el país se ha sido sumido en una crisis política desde que las protestas estallaron inicialmente sobre una reforma de las pensiones ahora desechadas.
Junto a su esposa y vicepresidente, Rosario Murillo, Ortega está acusado de violaciones de los derechos y de liderazgo autoritario, una de las demandas clave de la oposición era que Ortega, adelantara las elecciones previstas para el 2021, algo que el ex guerrillero de 73 años ha rechazado de plano.
Alrededor de 150 prisioneros han sido liberados desde que las conversaciones comenzaron el mes pasado, aunque sólo con arresto domiciliario, la oposición ha exigido su liberación total.
La unión de líderes de negocios, parte de ACJD, afirmó que la represión del sábado mostró que «no estamos ante un estado policial que no permite la expresión de los derechos constitucionales fundamentales de todos los nicaragüenses».
